La noche de este martes, el presidente de la república, Nayib Bukele, brindó su discurso ante la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas en Nueva York, en donde realizó un llamado a los países poderosos a respetar la soberanía y libertad de las otras naciones; y agregó que, como país, aún se necesita «que se nos reconozca nuestro derecho a ser libres».
El mandatario salvadoreño destacó en primer lugar, que El Salvador es un país unido y libre, que le permite a su pueblo tener la capacidad de decidir en qué dirección desea ir:
«En El Salvador encontrarán un pueblo unido luchando por su libertad, la libertad de escoger hacia donde vamos, y como lo queremos lograr», dijo el presidente Bukele en el inicio de su discurso.
Por otra parte, aseguró que existen países poderosos que no solamente tienen más que los demás, sino que se sienten dueños de países como El Salvador:
«Vengo de un pueblo donde nuestro destino siempre fue controlado por otros. Un grupo de países poderosos no solo tienen mucho más que todos los demás, sino que se creen dueños de todo lo que tenemos los países que no somos poderosos».
Por tanto, aseguró sobre El Salvador que «todavía necesitamos que se nos reconozca nuestro derecho a ser libres».
El presidente Bukele realizó la comparativa que cada nación tiene el derecho de hacer los cambios que sean necesarios: «El vecino rico no tiene ninguna autoridad para exigirle al vecino pobre que regrese al pasado ni tiene autoridad para mandar en su casa», agregó.
Para ser libres depende de cómo nos ven los demás, pero principalmente de cómo nos vemos a nosotros mismos. Por lo tanto, además de decidir que queremos ser libres, es requisito indispensable que los poderosos respeten nuestra libertad».
No obstante, destacó que el país pasó a ser reconocido como uno de los más peligrosos del mundo, a ser reconocido por lo que puede ofrecer, entre lo que se encuentra el turismo, las playas y el surf.
«No pueden venir a mandar a nuestras casas (los países ricos). En poco tiempo, El Salvador pasó de ser el país más peligroso del mundo, a estar en camino de ser el más seguro, pasamos de ser un país desconocido, a uno conocido por las playas y el surf».
También realizó un llamado a los países poderosos, a los cuales tendió la mano, siempre bajo el principio de la igualdad soberana y el respeto de las naciones:
«A los países ricos: les ofrecemos nuestra amistad. La ONU está basada en el principio de soberanía de todos los pueblos, en el principio de la igualdad de derechos y a la autodeterminación de los pueblos».
Además, instó al resto de mandatarios a cambiar la forma en que se ven a las naciones: «Si hemos logrado que un puñado de individuos se vean con respeto, entonces habremos logrado algo con estas palabras».
El mandatario salvadoreño asistió a este encuentro, que reúne a los presidentes, primeros ministros y jefes de Estado de todos los países miembros, en el cual informan sobre avances en sus países, y sientan sus posturas sobre temáticas a escala internacional.
El presidente Bukele llegó a este discurso con la aprobación de un 95 % de la población encuestada por la firma encuestadora CID Gallup.
De acuerdo con los resultados, los salvadoreños aprueban las medidas que el Ejecutivo ha tomado en materia de seguridad y combate frontal a las pandillas.
De igual manera, en la evaluación general hacia la gestión del presidente Bukele, el porcentaje de aprobación que le da la población es del 85 %, siendo la más alta entre los mandatarios latinoamericanos.