El 13 de julio de 2003, cuando Valeria María Morán Andrade vino a este mundo, tenía solamente 5 meses y medio de formación en el vientre de su mamá y debido a que era muy prematura pasó los siguientes dos meses en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), y el siguiente mes en la Unidad de Cuidados Intermedios del Hospital de Maternidad.
Su mamá, Tania Andrade, la esperaba con mucho amor, a pesar de que los médicos le advirtieron que el parto prematuro podría tener complicaciones de salud, incluso le dijeron que la pequeña tenía pocas esperanzas de vida.
En los siguientes meses le diagnosticaron Parálisis Cerebral (P.C.), un trastorno que afecta la corteza motora del cerebro (el órgano que dirige el movimiento muscular), y produce una condición que causa debilidad y problemas para usar los músculos. Por lo tanto, genera dificultad para movilizarse y problemas de equilibrio y postura.
Su mamá recuerda que desde que Valeria estaba pequeña la crió como a cualquier niño y la llevaba a la guardería porque tenía que ir a trabajar: «Madrugábamos todos los días y salíamos de la casa a las 5 de la mañana para poder tomar el bus y yo la llevaba cargando a la guardería donde la cuidaban hasta que salía del trabajo y la pasaba a traer para llevarla de regreso».
A pesar de no contar con los recursos económicos suficientes, Andrade ha hecho todo por ayudar a su hija y en el afán de proporcionarle las condiciones que le permitan desarrollarse plenamente, la ha llevado a diferentes lugares para buscar ayuda como el Instituto Salvadoreño de Rehabilitación Integral (ISRI), y luego, cuando se mudaron a Santa Tecla, trasladó su atención a Funter.
«En esos lugares uno conoce muchas personas que también tienen hijos o familiares con la misma condición o condiciones similares, y ahí es que yo me daba cuenta de los lugares a donde la podía llevar para que la trataran con diferentes terapias», recuerda Andrade.
La lista de terapias que Valeria ha recibido es larga, su mamá se acuerda de algunas a las que la llevó, como terapia de lenguaje, terapia sensorial, terapia física, hidroterapia, terapia ocupacional, entre otras; pero sin duda la que considera que más le ha servido es la equinoterapia, es decir, con caballos.
Las terapias son fundamentales para las personas que padecen P.C. porque ayudan a fortalecer sus músculos y mejorar la movilidad; sin embargo, hay casos como el de Valeria, a quien le hicieron una revaluación en la adolescencia, que fue diagnosticada con una pérdida de la movilidad permanente.
En medio de ese panorama difícil, en el que además su mamá se quedó sin trabajo, decidieron no rendirse y aunque detuvieron las terapias que estimulan la movilidad, sí continuaron llevándola a otras para mejorar el habla, fomentar la independencia, corregir postura y las emocionales, que son fundamentales para sobrellevar esta condición.
Lo más importante es que su mamá la ha motivado a seguir estudiando y con diferentes métodos como estudios a distancia y exámenes de suficiencia ha logrado graduarse de bachiller. Actualmente está estudiando de forma autodidacta tres idiomas como inglés, italiano y francés, pero desea ir a la universidad, escribir un libro y poder viajar.
Actualmente ha desarrollado un gusto por el dibujo y la pintura y señala que es «un medio que me permite conocerme, expresar mis ideas a los demás porque este arte es como un lenguaje que todos entienden».
UN APOYO PARA VALERIA
Su mamá desea seguir apoyándola, pero cada vez se vuelve más complicado por el factor económico y sobre todo el factor físico. Actualmente, Valeria tiene 19 años y los cuidados que su mamá le hace desde asearla y cargarla para moverla, sentarla o acostarla le están pasando factura a su salud.
Sin embargo, ella considera que nunca dejará de ayudar a su hija, pero ha buscado un apoyo solidario para recaudar fondos y así llevarla a que continúe con terapias y, de alguna manera, que pueda continuar con sus estudios.
Para lograrlo han creado una cuenta de Gofundme para recaudar fondos y poder llevarla a recibir equinoterapia, donde la llevaba de pequeña, porque considera que es un tratamiento integral que le estimula el desarrollo cognitivo, físico, emocional, social y ocupacional, aspectos importantes cuando su meta es que tenga una mejor calidad de vida.
Si usted está interesado en apoyar a esta joven puede hacerlo comunicándose con Andrade al 7991-3795 o ingresar a www.gofundme.com en la publicación Terapia en caballo: Horse therapy.