Los envíos de remesas en Latinoamérica crecen un 10 % anual desde 2014, un ritmo más acelerado que a escala mundial, donde hay un incremento del 4 %, según un reciente estudio de Mastercard.
De acuerdo con la multinacional financiera, en 2022 el volumen de remesas formales en Latinoamérica alcanzó $146,000 millones, más del doble que hace una década y, según sus proyecciones, 2024 marcará un cambio hacia una mayor velocidad, simplicidad y seguridad a medida que los envíos digitales comiencen a superar el envío de dinero en físico a través de las fronteras.
«Gracias a años de digitalización acelerada, los consumidores de Latinoamérica cuentan ahora con una alta penetración de la telefonía móvil, un mayor acceso a internet y menos personas no bancarizadas, lo que ha impulsado el crecimiento de las remesas digitales en la región», apunta el informe.
La compañía proyecta que a medida que las tendencias continúen dando forma a la agenda digital de la región se podría registrar un aumento de $20,000 millones en remesas digitales para 2026.
«En los últimos años, los proveedores tradicionales han dado paso a nuevos actores en la industria, incluyendo fintech, billeteras digitales, compañías de “blockchain” y otras empresas de tecnología, respondiendo a las tendencias observadas en la industria de remesas de Latinoamérica», destaca.
EL CASO DE EL SALVADOR
Durante 2023, El Salvador acumuló $8,181.8 millones en remesas, según el último informe del Banco Central de Reserva (BCR).
Este monto implicó un crecimiento de 4.6 % con respecto a 2022 cuando estas transacciones totalizaron $7,819.6 millones, lo que significa que las familias percibieron $362.2 millones más hasta el cierre del año.
Se trata de una cifra inédita, ya que es la primera vez en la historia del país que las remesas superan la brecha de los $8,000 millones, esto al contrastar la base de datos del BCR que mantiene registros de estas transacciones desde 1991.
Los datos recientes indican que en 2019 el monto acumulado de estos giros económicos fue de $5,656.2 millones; en 2020, de $5,929.9; en 2021 se registró un salto importante con $7,585.3 millones y en 2022 con $7,819.6 millones.
Respecto al comportamiento del año pasado, los datos muestran que el flujo de las remesas se mantuvo por encima de los $600 millones durante 11 meses, a excepción de enero. Mientras que, los meses con mayores montos fueron marzo con $712.2 millones, mayo con $751.6 millones y diciembre que reportó $790 millones.
La importancia de las remesas para la economía local también fue destacada en un reciente informe de la financiera multinacional Santander que indica que representan el 24 % del PIB del país.