E l presidente de la Asamblea Legislativa, Ernesto Castro, aseguró ayer que desde ese órgano del Estado seguirán protegiendo la vida de los salvadoreños honrados y reiteró que El Salvador no volverá a los «tiempos de portadas de sangre», refiriéndose a los titulares de medios impresos que informaban en años anteriores sobre la imparable cantidad de asesinatos registrados en el país.
«Lo tenemos claro: protegeremos la vida de los salvadoreños. Y no volveremos al pasado de muerte y dolor, a los tiempos de las portadas de sangre, a ese triste agosto de 2015 en que se registraron 907 homicidios», escribió Castro en su cuenta de X, tras aprobarse otra prórroga del régimen de excepción.
El congreso avaló la extensión 30 días de dicha medida constitucional en la sesión plenaria del pasado martes con los votos de los diputados de Nuevas Ideas, PDC y PCN. La diputada de VAMOS, Claudia Ortiz, que en la víspera de la extensión había expresado que «estamos en un país donde todos viven con miedo», votó en contra de extender la medida constitucional.
Marcela Villatoro y Raquel Serrano, diputadas de ARENA en la sesión del martes anterior, votaron abstención cuando la petición de prórroga hecha al parlamento por el consejo de ministros fue sometida a consideración del pleno. En su mensaje en X, Castro recordó los beneficios que el régimen de excepción ha dado al país, fortaleciendo el Plan Control Territorial (PCT).
«Es algo muy diferente a lo que vivimos ahora: un país en verdadera paz», consideró el presidente del congreso.
Con la estrategia del PCT y el régimen de excepción se han reducido drásticamente los homicidios en el país, se ha detenido a más de 81,000 pandilleros; además, se han recuperado territorios que estaban en poder de pandilleros y se dieron duros golpes al narcotráfico y al crimen común y organizado.
Al referirse a los «tiempos de portadas de sangre», Castro vinculaba el titular en la portada de un matutino publicada en agosto de 2015 que informaba que «agosto terminó con 907 homicidios» en todo el país.
La cantidad de asesinatos registrada en ese mes, que no tenía precedentes, ocurrió durante el segundo Gobierno efemelenista, bajo el mando de Salvador Sánchez Cerén, cuyo quinquenio fue el más violento, totalizando 23,020 homicidios en el territorio nacional. Sánchez Cerén ahora huye de la justicia.