Las jugadoras en el campo y todo el banquillo saltaron al sonar el pitazo final del partido que les dio el primer título de su historia.
La lateral izquierda Olga Carmona marcó el gol de la victoria de ‘la Roja’ en el minuto 29 tras un servicio de Mariona Caldentey para adjudicarse la copa del Mundial de Australia y Nueva Zelanda.
La final se disputó en el Stadium Australia de Sídney, al tope de aficionados entusiastas alentando a ambos equipos.
Las dos selecciones salieron con ímpetu al terreno de juego, con ligero dominio de las inglesas, que sacaron el primer remate directo en el minuto cinco, y que 10 minutos después pegaron un balón en el travesaño.
Pero España no se quedó atrás y en el minuto 11 una jugada de Salma Paralluelo estuvo cerca de convertirse en gol.
Las inglesas, con una parte baja sólida comandada por Millie Bright, se multiplicaban por impedir el enlace del mediocampo español con el juego explosivo de Salma Paralluelo, una amenaza constante.
España apostó al juego de control de Aitana Bonmatí y Jenifer Hermoso para conectar al frente con su línea de ataque.
Inglaterra, en cambio, centró su juego en la solidez defensiva y los balones largos en busca de las internadas en profundidad de Alessia Russo y Lauren Hemp.
El equilibrio se rompió cuando Teresa Abelleira recuperó un balón por la banda derecha y cruzó a la izquierda donde Caldentey sirvió a la internada de Carmona para poner el 1-0 definitivo.