El fiscal general de la República, Rodolfo Delgado, informó que investigan las culpabilidades en los homicidios de las 12 personas en la estampida ocurrida el pasado 20 de mayo en el estadio Cuscatlán cuando se jugaba el partido entre el Alianza y Club Deportivo FAS.
«Por el momento, las conductas criminales que estamos investigando son los homicidios, determinando qué grado de culpabilidad puede existir y qué grado de intencionalidad podría atribuirse, así como el tema de las lesiones a estas personas», indicó Delgado.
El jefe fiscal dijo que en estos momentos no pueden hablar de una persona directamente señalada. «Estamos entrevistando a todos los involucrados en los aspectos de seguridad del evento y determinando la cantidad de personas que debían entrar en este partido de fútbol».
Delgado expresó que, desde la noche del sábado, la Fiscalía General de la República (FGR) atendió el llamado ante la emergencia, que ha enlutado al fútbol nacional y en donde la afición ha salido perdiendo.
Agregó que, tras el suceso, los fiscales en conjunto con la Policía Nacional Civil (PNC) han estado ejecutando diligencias. «Han realizado los reconocimientos de los fallecidos y trasladados a Medicina Legal para las autopsias correspondientes. También, se ha realizado rastreo en todos los hospitales nacionales y privados del área metropolitana de San Salvador, hemos logrado identificar al menos 59 personas lesionadas», detalló el Fiscal General.
El sábado, cuando se jugaba el clásico Alianza-FAS por los cuartos de final, unas 4,000 personas se quedaron fuera del estadio Cuscatlán, ya que el único portón habilitado del sector general (sol) fue cerrado, y al tener boletos en manos empezaron a exigir su ingreso, hasta que optaron por derribar el portón y provocar con ello la avalancha humana que dejó como saldo: 12 muertos y cientos de lesionados.