Dejando atrás su papel como la Nana Fine en la serie «La Niñera», una de las sitcoms más populares de la década de los 90, Fran Drescher mostró toda su energía e ímpetu como presidenta del Sindicato de Actores de la Pantalla (SAG-AFTRA) y denunció que los estudios cinematográficos y televisivos engañaron a los actores y guionistas en las negociaciones por la huelga de este gremio que se vive actualmente en Estados Unidos.
«Es algo muy serio que afecta a miles, si no a millones de personas en todo este país y en todo el mundo. No solo los miembros de este sindicato, sino también las personas que trabajan en otras industrias que sirven a las personas que trabajan en esta industria. No teníamos otra opción. Nosotros somos las víctimas aquí. Estamos siendo victimizados por una entidad muy codiciosa», dijo Drescher durante la declaratoria de huelga del sindicato.
«No puedo creer, francamente, lo lejos que estamos en tantas cosas. Es asqueroso. Me avergüenzo de ellos. Están en el lado equivocado de la historia. Las empresas dicen que pierden dinero cuando ganan miles de millones. Si no nos mantenemos firmes en este momento, todos vamos a estar en problemas. Todos vamos a estar en peligro de ser reemplazados por máquinas y grandes empresas», agregó.
De igual forma, con un discurso sumamente potente y contundente, Drescher denunció que los estudios pidieron alargar las negociaciones por dos semanas para continuar con las giras publicitarias de películas como «Barbie» u «Oppenheimer», dos de las grandes apuestas del cine para estas semanas.
«Nosotros, de buena fe, les dimos una extensión, con la esperanza de que pudieran hacer profundas gestiones, y tuviéramos realmente algo que discutir. Pero nos engañaron. Se quedaron a puertas cerradas, cancelaron nuestras reuniones, perdiendo el tiempo. Probablemente todo fue para tener más espacio para promocionar sus películas del verano, porque no salió nada que fuera significativo», dijo Drescher ayer jueves, durante la declaratoria de huelga por parte del sindicato.
Con el inicio de la huelga, según las reglas del SAG-AFTRA, los actores no podrán promocionar sus películas ni echar andar cualquier proyecto para televisión o cine hasta que se levante oficialmente la huelga y se reanuden las negociaciones, lo que paraliza la industria cinematográfica y televisiva en Estados Unidos.
«En realidad, me sorprendió. Pero creo que pude haber sido ingenua, porque esta fue mi primera gran negociación. Realmente pensé que podíamos llegar a un consenso. Que pudieran ver cómo este nuevo modelo de negocio ha sido impuesto dramáticamente a toda la industria», comentó también la presidenta del sindicato.
Pese a esta denuncia de engaño, Drescher destacó que el SAG-AFTRA está en disposición de continuar con las negociaciones para llevar la situación a un buen término. «La huelga no es el final, es solo el siguiente paso. Nos encantaría seguir negociando. Pero la pelota está en su cancha», dijo.
Fran Drescher fue una de las grandes figuras de la comedia televisiva en la década de los 90 gracias a la serie «La NIñera», la cual tuvo seis temporadas y con la que la actriz inmortalizó su papel como Fran Fine, una peculiar mujer que se vuelve la niñera de los tres hijos de un productor de teatro millonario. Ahora, es la presidenta del sindicato y una de las voces más potentes en cuanto a derechos de trabajadores del espectáculo.