Las proyecciones del Banco Central de Reserva (BCR), indican que la inflación en El Salvador para este 2024 oscilará entre 0.5 % y 1.0 %, por debajo del promedio centroamericano y latinoamericano en el cual se ha mantenido desde 2023.
Mientras que el año pasado, según Rodríguez, la inflación anual promedió el 4 %, pero se mantuvo a la baja y se estabilizó a diciembre en un 1.2 %, llegando a su nivel más bajo desde 2021.
Mantener un promedio de inflación baja, permitirá al país promover el uso eficiente de los recursos productivos, generar certidumbre y favorecer la inversión pública y privada, la cual también se prevé que alcance niveles récord este 2024.
De acuerdo con lo expuesto por el BCR, la baja en los índices inflacionarios se mantendrá debido a factores como el comportamiento del precio internacional del petróleo y sus derivados y la continuidad de proyectos de diversificación de la matriz energética impulsados por recursos renovables, lo que permitirá mantener bajos los precios de la electricidad, así como una moderada disminución en los precios de los alimentos.
El presidente del BCR, Douglas Rodríguez, explicó que a febrero de este 2024, la inflación de El Salvador fue de 0.8 %, ubicándose como la segunda más baja de Latinoamérica cuyo promedio es de 3.3 %, excluyendo a Argentina que presenta un pico inflacionario del 254.2 %. Si se suma a este país, el total latinoamericano alcanza el 20 %.
«En comparación con Latinoamérica somos el segundo país con la inflación más baja, superados únicamente por Costa Rica, pero ese país no tiene inflación, sino que al contrario tiene una cifra negativa de inflación», añadió Rodríguez.
La deflación (o inflación negativa) que afecta a Costa Rica, provoca una caída general y continuada de los precios de la economía y, aunque puede parecer que una bajada en los precios es algo positivo, la realidad es que la deflación tiene efectos perjudiciales en la economía como la reducción del gasto y la inversión, lo que supondría un menor crecimiento económico y un aumento en el desempleo.
Mientras que en el resto de países centroamericanos, Nicaragua presenta un 5.8 % de inflación, Honduras 4.5 %, Guatemala 3.3 % y Panamá un 1.2 %.
Esta dinámica concuerda con el comportamiento del Producto Interno Bruto (PIB), que en el cuarto trimestre de 2023 subió a 4.5 %, llevando a la economía salvadoreña a experimentar un crecimiento histórico anual del 3.5 %.