El Juzgado Décimo Primero de Paz de San Salvador, puso en libertad a cinco acusados de lavado de dinero vinculados a la sustracción de fondos de Casa Presidencial en la administración de Elías Antonio Saca, solo el cuñado del exmandatario, José Eduardo Mixco Rivas, seguirá en prisión y en el caso de dos prófugos se resolverá revisando el expediente.
Al finalizar la audiencia inicial el juez decidió imponerle medidas alternas a la detención a los hermanos Federico Antonio y Carlos Rafael Barrillas Flores, ambos deberán ir a firmar una vez al mes al juzgado de instrucción que diligencia la segunda etapa procesal, se les retuvo el pasaporte y deben pagar una fianza de $15,000.
Mientras que Juan José Francisco Guerrero Chacón, Julio Ernesto Mena Campos, Rosa Miriam Salinas de Avilés y María de la Luz Pérez Franco, fueron puestos en libertad y solo deberán cumplir medidas sustitutivas, a los cuatro no se les impuso pago de fianza.
En cuanto a Irving Pavel Tóchez Maravilla y su esposa Ivette Fidelia Salinas de Tóchez, por se prófugos se resolverá con vista del requerimiento (revisando el expediente). La Fiscalía General de la República ha solicitado al juzgado que les emita orden de captura y que se tramite con la Policía Internacional (Interpol) difusión roja.
Tóchez Maravilla, exasesor de Saca entre los años 2004 al 2009 y director ejecutivo de la CEL en el gobierno del prófugo y asilado en Nicaragua, Mauricio Funes. El juez decretó medidas alternas a la detención a cinco de los acusados para mantenerlos atados al caso de lavado de $16 millones.
El ministerio público había solicitado que los procesados siguieran en prisión, pero al finalizar la audiencia inicial el juzgado no accedió a esa pretensión. Supuestamente los $16 millones los habrían lavado desde el 2004 hasta el 2015.
La Fiscalía también señala a cinco empresas de haber colaborado con el expresidente Saca en el blanqueo de dinero que fue desviado de la cuenta subsidiaria del Tesoro Público de la Presidencia de la República.