El papa Francisco regaló los dos fragmentos de la «Vera Cruz», uno de 5 milímetros y el otro de 1 centímetro, con motivo de la coronación del monarca y su esposa Camila el 6 de mayo en Londres.
Se dio a dichos fragmentos la forma de pequeña cruz y se incorporaron al diseño general, visibles tras una gema de cristal rosa.
El arzobispo de Gales, Andrew John, bendijo la nueva Cruz de Gales ante dignatarios y feligreses en un servicio religioso celebrado en Llandudno, en el norte de esa nación británica.
La cruz será trasladada a Londres para encabezar la procesión de la coronación.
La cruz «habla de nuestra fe cristiana, nuestro patrimonio, nuestros recursos y nuestro compromiso con la sostenibilidad», afirmó el arzobispo.
«Estamos encantados también de que su primer uso sea guiar a sus majestades (Carlos y Camila) a la Abadía de Westminster en el servicio de coronación», agregó.
Carlos regaló la Cruz de Gales a la Iglesia Anglicana de Gales con motivo de su centenario.
El diseñador Michael Lloyd tardó dos años en hacerla y se fabricó con lingotes de plata reciclados y fragmentos de madera y pizarra galesas.
Tras la coronación, será compartida por las iglesias anglicana y católica romana de Gales.
El propio Carlos aplicó la marca de autenticidad del rey -una cabeza de leopardo- a los elementos de plata de la cruz durante el año pasado en Londres.