El más reciente informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) postula que «el uso de modalidades de trabajo flexibles, como las utilizadas durante la crisis de la pandemia COVID-19, son favorables para la economía, las empresas y los trabajadores».
En la investigación denominada «El tiempo de trabajo y el equilibrio entre el trabajo y la vida privada en el mundo», el organismo analizó los efectos del tiempo laboral en el rendimiento de las empresas y en el equilibrio entre vida profesional y privada de los trabajadores.
«Este informe muestra que si ponemos en práctica las lecciones aprendidas de la crisis provocada por el COVID -19 y observamos con precisión cómo se estructuran las horas de trabajo, así como su duración en el conjunto, podemos crear una situación ‘ganador-ganador’, mejorando tanto el rendimiento de las empresas y el equilibrio entre la vida profesional y privada», afirmó Jon Messenger, autor principal de la investigación.
La publicación desvelada, el 6 enero de este año, exploró las respuestas de los gobiernos y de las empresas a la crisis durante la pandemia, que inició en 2020, para la continuidad del funcionamiento de las diferentes entidades y a la preservación de los puestos de trabajo.
Según el estudio el aumento del número de trabajadores que realizaron horas reducidas contribuyó a prevenir las pérdidas de empleos.
En este sentido, la OIT remarca que las medidas adoptadas durante la crisis sanitaria proporcionan nuevas pruebas de que el hecho de conceder más flexibilidad a los trabajadores en cuanto a la forma, el lugar y el momento en el que trabajan es factible, ya que esto puede ser positivo tanto para ellos como para las empresas, mejorando la productividad.
A la inversa, según la OIT, la restricción de la flexibilidad puede generar costos considerables atribuidos a situaciones vinculadas a una mayor rotación del personal.
El informe analizó diferentes organizaciones del tiempo de trabajo y sus efectos sobre el equilibrio entre la vida profesional y privada, como los sistemas de trabajo por turnos, por pedido, horarios comprimidos y horas anuales promedio y advierte que los beneficios de algunas de estas modalidades flexibles, como una mejor vida familiar.
«Existe una cantidad considerable de evidencias de que las políticas de equilibrio entre la vida profesional y privada proporcionan importantes beneficios a las empresas, sustentando el argumento de que este tipo de políticas son provechosas tanto para los empleadores como para los empleados», señala el informe.
Por otra parte, también señala que muchas de esas prácticas de emergencia, como la implementación del teletrabajo, podría marcar una tendencia para entender los mercados laborales en el futuro.
«La implementación a gran escala del teletrabajo en casi todas las partes del mundo donde era posible hacerlo, cambió… la naturaleza del empleo, y probablemente lo hará más en un futuro previsible», afirma.