Este mes, El Salvador celebra los 200 años del surgimiento como república. Ha sido una historia corta en comparación con otras naciones, pero ha significado una serie de conquistas para dar paso a la vida como nación independiente, algo que, con el paso de los años, se terminó decantando en favor de élites económicas y poderes políticos corruptos.
Sin embargo, ahora estamos viendo los albores de una nueva historia, con una gran oportunidad de trascender hacia mejores condiciones de vida para todos los salvadoreños. Nunca en la historia de El Salvador han existido como hoy las condiciones para el despegue económico, el desarrollo nacional y la justicia para todos los ciudadanos.
Nunca en la historia El Salvador ha tenido la oportunidad de aprovechar todo su potencial, de obtener mejores beneficios en la comunidad internacional y de convertirse en un referente para la región.
De hecho, la nación ya es ejemplo mundial por el manejo de la pandemia, por el ritmo de vacunación con que el Gobierno del presidente Nayib Bukele ha avanzado y por el modelo de funcionamiento del megacentro, además de más de un centenar y medio de puntos en todo el territorio.
Nuestras costas han sido reconocidas internacionalmente por su alta calidad para la práctica del surf y otros deportes acuáticos, lo que se concretó con el primer mundial de surf para calificar a los Juegos Olímpicos y que se repetirá próximamente.
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) destaca el desempeño económico del país y lo posiciona entre los que van a la delantera en la región. Incluso asegura que, junto con Panamá, es uno de los motores de la recuperación económica de Centroamérica. Las últimas proyecciones del crecimiento económico que ha presentado el Banco Central de Reserva oscilan entre el 9 % y el 12 % para el cierre de 2021.
Dentro de pocos días, El Salvador será el primer país en todo el planeta en tener el bitcóin como moneda de curso legal, lo que atraerá a una enorme cantidad de inversiones no solo tecnológicas (interesadas en continuar con el «minado»), sino también de otras áreas en las que la criptomoneda ha tenido aceptación.
Desde ya, la nueva moneda ha traído la oportunidad de hacer nuevos negocios en la economía local, como comerciantes que están aprovechando la nueva modalidad para vender sus productos, que van desde pizzas o cocos hasta servicios como cortes de cabello.
El Salvador está reescribiendo su historia y el ánimo predominante es el optimismo. Empezamos con muy buen pie estos 200 años.