En noviembre de 2021, el presidente de la República, Nayib Bukele, anunció la creación de Bitcoin City, la primera ciudad del mundo que basará su economía en la primera criptomoneda. Y el principal método para su financiación será la emisión de un bono estatal de $1,000 millones.
De estos fondos, $500 millones se utilizarán para la compra de bitcóin, mientras que el dinero restante será destinado a obras de infraestructura energética y minería de bitcóin en Bitcoin City.
Samson Mow, criptoinversor y quien fungió como director de estrategia de la empresa de tecnología blockchain «Blockstream», explicó a «Diario El Salvador» que en la generación de los bonos hay varios actores involucrados.
«Está Blockstream que trabaja en la Liquid Network (una red de liquidación intercambiaria que permite transacciones de bitcoin más rápidas), y Bitfinex, una de las casas de cambio de criptomonedas más grandes del mundo, que venderá los bonos. Estas piezas crearán el bono volcánico», detalló.
Según precisó Mow, se emitirán los tokens (vales digitales) del bono en la Liquid Network, y luego Bitfinex permitirá que los inversores tengan acceso a una plataforma de venta.
En la práctica, según el experto, el día de la venta de los títulos, Bitfinex va a habilitar una página web en la que los usuarios van a poder comprar estos vales digitales con dólares, bitcóin u otro tipo de criptomonedas que el Gobierno de El Salvador acepte. El mínimo para participar será de $100.
Sin embargo, previo a eso será necesario registrarse en Bitfinex Securities, un producto de esta empresa, donde habrá un proceso de verificación.
«El mínimo para invertir es $100 gracias al uso de Liquid, y eso abre la posibilidad para que personas normales puedan invertir en El Salvador. Históricamente, los bonos fueron destinados a entes con muchos fondos, y el mínimo eran miles de dólares o millones», señaló.
El funcionamiento de estos bonos incluye un cupón de intereses del 6.5 % anual en dólares que se pagará a los inversionistas en cada mes de enero por 10 años, que es lo que durará la emisión. Al concluir ese tiempo, la inversión inicial también será devuelta a los participantes.
Además, el bono tiene un componente bitcóin. Tras cinco años se desbloqueará un cupón extra que genera un dividendo. Cuando los $500 millones en bitcóin sean vendidos, el Gobierno va a compartir esas ganancias con los inversores que compraron estos títulos.
Por otro lado, más allá del beneficio para los criptoinversionistas, Mow señala que gracias a esta apuesta El Salvador podría pagar completamente su deuda externa.
«En principio serán $1,000 millones. Pero preguntémonos en cuánto se convertirá en unos años, cuando la criptomoneda continúe su crecimiento en 10 veces más. Y eso será más que suficiente como para erradicar toda deuda», puntualizó.