Lukaku contra Immobile, De Bruyne contra Verratti: el Bélgica-Italia de hoy en Múnich no es sólo el duelo estelar de cuartos de la Eurocopa, sino también un choque generacional entre una «Nazionale» desacomplejada y unos «Diablos Rojos» hechos para el título a pesar de las importantes lesiones.
En esta Eurocopa marcada por las sorpresas, italianos y belgas son de los pocos supervivientes entre las seleccionas llamadas a llegar lejos al inicio del torneo.
En cuatro confrontaciones, nunca Bélgica batió a Italia en un gran torneo antes de su partido de hoy, mientras que en el otro choque España partirá como favorita ante la sorprendente Suiza.
En Bélgica las incertidumbres respecto a los dos cerebro: Kevin De Bruyne y Eden Hazard, ponen un poco de niebla en el camino de los «Diablos Rojos» hacia un primer título.
Eso sí, Bélgica desde las desilusiones de 2016 y de 2018, aprendió a ganar «a la italiana». El delantero belga Dries Mertens, familiarizado con la cultura futbolística italiana tras ocho temporadas en Nápoles, reconocía que han evolucionado.
«Hemos aprendido también a mantener la puerta a cero. Es de esta forma que se ganan los torneos», señaló el ariete en rueda de prensa.
Una calificación frente a la Nazionale puede hacer creer que vía de la final está abierta. El rival del vencedor del duelo Bélgica-Italia jugará contra el ganador del Suiza-España, que se disputa el mismo día en San Petersburgo.
Navaja suiza

Los suizos, incapaces de clasificarse en un partido de eliminación directa desde 1938, dieron la gran sorpresa del torneo al derrotar a los actuales campeones del mundo (3-3, 5-4 en los penales).
Los españoles también tuvieron que hacer un gran esfuerzo para vencer a Croacia por 5-3 en la prolongación, tras empatar en el tiempo reglamentario. La Roja fue criticada tras dos empates inaugurales, luego marcó diez goles en dos partidos.
Contra los subcampeones del mundo croatas, también marcaron cinco, al término de un partido mal iniciado en octavos, tras el error del portero Unai Simón y después recibiendo dos goles en los minutos finales del tiempo reglamentario, tras ir ganando por 3-1.