Los fondos de inversión atraen cada vez a más salvadoreños, y eso se evidencia en el alza reportada en el último año. Hasta el 31 de agosto de 2019, el patrimonio neto era de $82.1 millones.
En 2020, a la misma fecha, el patrimonio era de $155.3 millones, es decir, un incremento de 89.2 %.
Hay que destacar que la cifra de ese patrimonio nunca es neta, debido a la fluctuación, lo cual se debe a que los inversionistas pueden realizar el rescate del depósito en el momento en que lo consideren oportuno.
Parte de la atracción que los fondos generan en los salvadoreños son las tasas de interés anual, que van desde el 3.07 % hasta el 7.4 %, con montos de participación entre los $250 y los $5,000, mientras que los ahorros en la banca comercial ofrecen intereses anuales que rondan el 3.47 % y el 4.41 %, según datos recientes del Banco Central de Reserva (BCR).
Los expertos aseguran que para invertir en productos bursátiles no es necesario ser un gurú en la materia o ser millonario.
En el país, el primer fondo de inversión inició operaciones hace casi cuatro años, y en la actualidad existen seis, de los cuales cinco son abiertos y uno, cerrado. Los fondos son administrados por tres casas gestoras: SGB Gestora de Fondos de Inversión, Atlántida Capital y Banagrícola, que juntas sumaban un patrimonio de más de $155.3 millones al 31 de agosto de 2020.
Crecimiento en plena pandemia
Las cifras demuestran que el comportamiento de este producto bursátil en la plaza local incrementó en volumen y en patrimonio administrado, pese a la pandemia.
Al respecto, la gerente general y administradora de fondos de inversión de Servicios Generales Bursátiles (SGB), Julia Castaneda, dijo que el crecimiento del patrimonio del fondo de inversión abierto (FIA) rentable a corto plazo mostró un mejor desempeño y creció 52.2 % en el primer semestre de 2020, el equivalente a $20.7 millones, frente al mismo período en 2019.
«El monto administrado del patrimonio del FIA de corto plazo en el primer semestre aumentó un 70 % en empresas y un 30 % en personas naturales, mientras que el FIA plazo 180 creció un 22.8 %, es decir, $2.9 millones. Esto signifa que el número de clientes ha crecido en personas naturales, pero en patrimonio el aumento viene dado por empresas», dijo Castaneda.
Los fondos Atlántida también reportaron un buen desempeño y obtuvieron un incremento. «El fondo Atlántida de liquidez tuvo un crecimiento de patrimonio de 124 % desde el 20 de marzo hasta el 31 de julio de 2020. En el caso del fondo Atlántida de crecimiento, el incremento fue del 50 %, aproximadamente», añadió el gerente general de Atlántida Capital, Javier Mayora.
Para el ejecutivo, el alza es un reflejo de la confianza depositada por los inversionistas en la gestora hondureña. En definitiva, en la plaza local este instrumento es uno de los que han apalancado el crecimiento del mercado bursátil, uno de los sectores financieros menos golpeados por el cierre económico que provocó la pandemia desde marzo pasado.
La herramienta bursátil
Este producto constituye una herramienta que agrupa a varios participantes con el fin de invertir en operaciones que logren una mayor rentabilidad, por ello cada vez ganan más terreno en la plaza salvadoreña.
Los aportes de los inversionistas se traducen en cuotas que varían según el monto con el que participen y la rentabilidad que obtengan.
La gestora es una entidad especializada a cargo de profesionales financieros, quienes administran y colocan las aportaciones en diferentes activos financieros (renta fija, renta variable, derivados o cualquier combinación) o inmuebles, acciones y bonos, entre otros, dependiendo del tipo de fondo.
El resultado de la inversión (aumentos o disminuciones del valor del patrimonio) se distribuye proporcionalmente entre los partícipes.
Existen dos modelos de fondos de inversión: abiertos, que no tienen un plazo definido ni límite de partícipes y la redención de la inversión se puede realizar en cualquier momento, y cerrados, que tienen un plazo definido y la inversión se puede recuperar hasta el final o negociar la cuota en la Bolsa de Valores de El Salvador.
Se debe tener en cuenta que hay que pagar una comisión por la administración de la inversión a la gestora que realiza la colocación del dinero. Esto dependerá del tipo del fondo en el que se invierta.
¿Cómo minimizar el riesgo de inversiones bursátiles?
Se debe tener en cuenta que la inversión en fondos también implica riesgos, como cualquier otra transacción de inversiones, pero la clave es saber determinar el nivel de estos y tener en cuenta una asesoría confiable en la inversión del dinero.
Las gestoras son supervisadas por la Superintendencia del Sistema Financiero (SSF) y administradas por la Bolsa de Valores de El Salvador (BVES), que perfilan el riesgo del dinero a invertir. Los participantes se clasifican en tres categorías según su perfil: conservador, moderado y especulador-agresivo. Esto depende de las características de los activos del inversionista, el tiempo, el instrumento en el que desee participar según sus objetivos y proyecciones en cuanto a la rentabilidad.
Hay que tomar en cuenta que los fondos que ofrecen tasas de rentabilidad más altas son los que presentan mayor riesgo, y los de menor riesgo usualmente son los de poca rentabilidad, aunque pueden gozar de otros beneficios, como seguridad en el tiempo. En definitiva, representantes del sector bursátil especificaron que en el contexto de la pandemia los fondos de inversión incrementaron en patrimonio.
Según datos oficiales de la SSF, al 31 de agosto de 2020 los fondos de inversión abiertos registraron un patrimonio de $151.3, y los cerrados, de más de $4 millones, haciendo un total de $155.3 millones, aunque la cifra nunca es neta, debido a que los inversionistas pueden realizar el rescate parcial o total de los fondos.