La vida de Lionel Messi, uno de los mejores futbolistas de la historia, ha dado varios giros impresionantes en este 2021. Sin duda alguna, el argentino ha vivido un año envuelto en polémicas, aunque, también, logrando por fin algo que durante mucho tiempo se le había negado: un título a nivel mayor con la selección de Argentina.
La primera parte de este 2021 de Messi estuvo marcada por una lucha por sobrevivir con el Barcelona. Las secuelas de un 2020 caótico para el equipo azulgrana aún estaban presentes, sobre todo, la herida aún sangrante sufrida en Lisboa en aquel inolvidable 2-8 ante el Bayern Munich en Champions League.
Sin embargo, cerradas las temporadas de liga, Messi se metió de lleno con la albiceleste para la disputa de la Copa América 2021, un torneo en el que demostró ser, al fin, el alma de su equipo, conduciendo a un plantel de jóvenes y veteranos a un título que tenían 28 años de no conquistar.
En la Copa América, Messi se convirtió en el Mejor Jugador del Torneo, en el Máximo Goleador del certamen (con 4 goles y empatado con el colombiano Luis Díaz) y en el Mejor Asistente de la competición (5 pases a gol), firmando así su mejor torneo a nivel mayor con Argentina y logrando el 10 de julio una victoria de 0-1 ante Brasil para alzarse con el título.
Este es el primer título a nivel mayor que Messi consigue con Argentina, luego de los fracasos en las finales de la Copa del Mundo de Brasil 2014 (ante Alemania) y las Copas Américas de 2015 y 2016, ambas ante Chile. Ahora, Messi rompía ese pensamiento de ser un jugador frío con su selección y lograba tocar la gloria con el equipo dirigido por Lionel Scaloni.
Pero, ese título era también el presagio de un auténtico infierno para Lionel Messi a nivel de clubes. En los primeros seis días de agosto, poco menos de un mes después de la Copa América, se producía la noticia más importante del mercado de fichajes de la última década: Lionel Messi, máxima estrella histórica del Barcelona, dejaría al equipo blaugrana por diversas razones.
El mundo del fútbol fue sacudido por una noticia que tiene muchas aristas, la mayoría de ellas financieras. El presidente del Barcelona, Joan Laporta, acusó a las disposiciones de LaLiga en el tope salarial, las cuales obligaban al equipo a prescindir de su histórica estrella. Sin embargo, en esos días, medios de comunicación y dirigentes hablaban, excepto Messi.
Fue hasta pasados unos días, el 8 de agosto, cuando en una conmovedora rueda de prensa, Messi anunció su salida, bañado en lágrimas y denotando el dolor que esto le implicaba. En sus declaraciones, Messi dejó en claro que intentó todas las formas posibles para continuar en el equipo culé, incluyendo una rebaja salarial de hasta un 50 %, pero que aún así, las finanzas del equipo hacían imposible su continuidad.
Despedido por sus compañeros de equipo, Messi abandonó el club en el que debutó en 2004 siendo una joven promesa del fútbol y donde se consagró como el máximo goleador y el corazón de un equipo que lo ganó todo de la mano del astro argentino, ese que dibujo filigranas y llenó de magia miles de partidos en el Camp Nou y en toda Europa.
Días después, Messi anunció que ficharía por el PSG para la siguiente temporada, algo que no tomó por sorpresa a nadie debido a los contactos que existieron entre el club parisino y Messi en los días en que se anunció su salida de Cataluña. Además, Neymar, excompañero de Messi en el Barcelona, jugaba un papel importante en su llegada a París.
Con el PSG, las cosas no han sido del todo buenas para Messi, quien, increíblemente, ha anotado solo un gol en la Ligue 1, aunque en Champions League ha sumado cuatro dianas para los parisinos. Pese a ello, en Francia se ha cuestionado su rendimiento e, incluso, se ha asegurado que Messi no se siente cómodo en la capital francesa.
Sin embargo, la Copa América fue suficiente argumento para que la revista France Football lo condecorara como el Balón de Oro 2021, premio que no estuvo exento de polémica, ya que muchos expertos consideraban al delantero polaco del Bayern Munich, Roberto Lewandowski, como el favorito al galarón.
Pese a ello, Messi obtuvo su séptimo Balón de Oro, convirtiéndose en el jugador más galardonado por la prestigiosa revista francesa y posicionándose como el mejor jugador del mundo en este año. A falta de lo que en enero dictamine la FIFA con su premio The Best 2021, Messi ha cerrado un año de luces y sombras, de glorias y derrotas, de alegrías y dolores. Sin embargo, la imagen que quedará para la historia es la de Lionel vestido de albiceleste conquistando América.