Con la frente en alto, su porte lleno de elegancia y triunfo y un espíritu que mantiene la chispa y la vivacidad de su encanto natural, Fátima Calderón ha regresado a El Salvador tras representar al país en Miss Grand Internacional 2023, celebrado hace algunas semanas en Vietnam, país que, según comenta, lo vivió como una fiesta nacional y una oportunidad para mostrar toda su belleza y riqueza turística.
Esa misma sensación es la que espera que El Salvador experimente en estos días en que el certamen de Miss Universo 2023 se lleva a cabo en tierras salvadoreñas y en el que casi 90 señoritas buscan la corona en el máximo certamen de belleza, pero que también les brinda la oportunidad de conocer los rincones mágicos que existen en El Salvador.
Para Calderón, el rubro de la belleza ha cobrado un nuevo brillo gracias a este evento y al trabajo del presidente de la república, Nayib Bukele. Además, asegura que las reinas de belleza que representan al país en todos los certámenes de belleza tienen la oportunidad de reflejar la mujer integral que son las salvadoreñas y exponer también al país ante los ojos del mundo.
Comencemos con tu reciente experiencia en Vietnam y en el Miss Grand International 2023. ¿Cómo lo viviste?
Fue súper bonito conocer otras culturas y otras personas. Es lo que uno se lleva de una experiencia como esta. Fue una experiencia de esas que dicen que son una vez en la vida. Fue fantástico. En Miss Grand International es un reto muy grande y un desafío diario, hay muchas actividades en las que hay que dar el 100 %. Es un poco extrema, son demasiadas cosas, demasiados fashion shows y competencias, así como otros retos que se van sumando.
En esta ocasión uno de los retos era cantar. En mi caso, siempre he sido bailarina y, para mí, cantar nunca ha sido fácil, pero lo intenté. Creo que los salvadoreños así somos: ante la oportunidad, nos llenamos de valor. En ese momento fui Selena… ¡Jajaja! Lo más importante es el animarse a hacer el reto y a dar lo mejor. Así me mentalicé y me quedo con la sensación de haber entregado todo de mí.
¿Tuviste alguna duda o algún momento de pérdida de confianza en todo el certamen?
Sí, en algún momento hubo duda. Cualquier cosa que no va en nuestra zona de confort nos da temor. Temía que la gente me juzgara. Pero las competencias son así. El hecho de atreverse es algo bueno. Mucha gente se divirtió conmigo, hice que mis compañeras bailaran conmigo. Les dije que, como latinas, teníamos que demostrar nuestra sangre y nuestro espíritu latino con toque de música. Las competencias son también para aprender, equivocarte y volver a levantarte.
¿Cómo reaccionaban cuando decías que eres de El Salvador? ¿Sentían curiosidad por el país?
En los últimos años El Salvador ha tenido mucha exposición. Antes solía pasar desapercibido o sele conocía por cosas negativas. A veces confundían al país con una ciudad de Brasil. Pero, ahora, tenemos una exposición muy diferente y es de aprovecharla. Mucha gente me comentaba sobre el Miss Universo en El Salvador y me decían que qué positivo es que El Salvador se esté dando a conocer en el rubro de la belleza, que por muchos años estuvo demasiado escondido. Debemos apoyar a las señoritas que incursionan en este campo, que estaba un poco en la oscuridad, pero ahora se muestra mucho más.
En estos días se celebrará Miss Universo. ¿Crees que este evento aporta una posibilidad de que el país se muestre al mundo?
El Salvador siempre ha sido muy turístico. Siempre hemos sido un país atractivo para los extranjeros. Ahora, con Miss Universo podemos tener una ventana para exponer al país como ese destino turístico ideal. Miss Universo es la oportunidad de que el mundo quede enamorado de El Salvador. Como salvadoreños debemos vivir esto como una fiesta. En estas semanas podemos crecer como sociedad y admirar lo que estas chicas aportan a la sociedad, no solo juzgarlas. Un certamen de belleza es una fiesta y debemos vivirlo como eso, como una fiesta.
¿Algo así se vivió en Vietnam con el Miss Grand International 2023?
Sí, justamente. Yo pude verlo en Vietnam, donde lo vivieron como una fiesta. Ahora, al tener Miss Universo en El Salvador podemos celebrar un gran logro para nuestro país. Además, es la oportunidad de conocer a personas de otros países y tener un intercambio de culturas. Podemos hacer que ellos se lleven la sensación grata de conocer a un salvadoreño, nuestra calidez como seres humanos.
¿Crees que celebrar Miss Universo puede ser una oportunidad para que también se derriben ciertos estigmas sobre los certámenes de belleza que aún puedan existir en la sociedad salvadoreña?
Ahora, en El Salvador, tenemos un presidente que nos ha dado la oportunidad de conocer cómo es un certamen de belleza. Ahora, la población puede ver que no solo se trata de la gala final o de las pasarelas, sino que hay algo más en todo un certamen de belleza. Es bonito que, como país, podamos vivir esta experiencia y que la gente vea que va más allá de sentarnos y vernos linda, sino que podemos aportar mucho a la sociedad.
¿Ves en el rubro de la belleza una oportunidad para que El Salvador también destaque internacionalmente?
El rubro de la belleza en El Salvador siempre se había visto muy superficial. Se piensa que solo se trata de señoritas que se esfuerzan solo por verse muy lindas y nada más. En mi caso, desde mi experiencia, creo que he podido aportar una imagen de la mujer salvadoreña, de que somos capaces de superar cualquier reto. Cada salida (en el evento de Miss Grand) fue para mí una pequeña victoria, una batalla que gané. Di lo mejor de mí, traté de emanar esa sonrisa que nos caracteriza a los salvadoreños. Mucha gente me decía que era agradable verme siempre tan sonriente, pero les decía que es cultural, que así somos los salvadoreños, muy atentos, muy amenos.
Por la vida cotidiana podemos llegar a perder un poco el rumbo. Pero, en mi caso, el certamen de belleza me ha permitido encontrar un camino. Pude explotar al máximo todo lo que he aprendido, los talentos que he desarrollado. Sentía que el resumen de todo lo que he hecho como mujer lo veía ahí. Esa es la oportunidad que dan estos concursos, un espacio para unir todo lo que una mujer es, ser una mujer integral y demostrar que las mujeres integrales existimos. ¿Qué damos las reinas de belleza? Una mujer integral a la sociedad.