Un grupo de comerciantes que habían construido ranchos a la orilla de la playa El Esterón, en Intipucá, La Unión, para instalar sus puestos de ventas están preocupados por el comportamiento que ha adoptado el mar últimamente, pues ha causado fuertes marejadas, al punto de erosionar toda la orilla donde estaban los puestos.
Los comerciantes y residentes de la zona están conscientes de que el mar está recuperando la superficie natural, lo cual les causará afectaciones a sus estructuras de playa y también a las obras que había ejecutado la alcaldía, tanto para la construcción de un plantel que servía de parqueo, las duchas y baños para los turistas, así como un rancho para guardavidas.
«Desde la tormenta Julia observamos el estero que se movió de donde era antes, y desde entonces el mar ha venido avanzando poco a poco, pero en tres días notamos que ha avanzado alrededor de 30 metros, y eso ha causado daños ya en varios ranchos», comentó María Magdalena Flores, propietaria de un rancho.
De momento son dos ranchos los que estaban más próximos a la playa los que han resultado afectados con esta condición marina, pero hay otros tres que también corren el mismo riesgo, más las obras de la alcaldía en las que invirtió para atraer a turistas a este sitio.
«El mar cada 10 años genera un movimiento que tiene que realizar para recuperar su territorio, y cuando se hizo este proyecto sí se pensó en esto, pero igual no se esperaba que hiciera el movimiento tan pronto. Aquí la única alternativa que estamos viendo es la construcción de un malecón para evitar que siempre se nos dé esta situación», expresó Ner Delgado, de la Unidad Ambiental de la alcaldía de Intipucá.