«Asesinan a motorista del transporte colectivo y la ruta suspende el servicio por temor a más ataques afectando a cientos de usuarios». Así era el común de las noticias cuando se informaba de las terribles condiciones de inseguridad bajos las cuales trabajaban buseros y microbuseros de las diferentes rutas, cuyas afectaciones le generaron graves problemas de movilidad a la población al no poder desplazarse a sus destinos.
Producto de estos ataques armados a las unidades hubo pasajeros que resultaron lesionados y, en el peor de los casos, hasta perdieron la vida. El común denominador de estos atentados era el no pago de la extorsión a los pandilleros, que según las estimaciones de los transportistas rondaba los $19 millones por año. Por más de 30 años los mareros hicieron del transporte colectivo una de sus principales fuentes de ingresos para financiar su actuar criminal, lo hicieron con total impunidad ante la mirada pasiva de los gobiernos corruptos de los partidos ARENA y FMLN que nunca se preocuparon por resolver la problemática.
A esto hay que sumarle que 2,452 personas vinculadas al transporte colectivo entre choferes de buses y microbuses de las diferentes rutas, cobradores, despachadores y empresarios fueron asesinadas en ataque de pandilleros entre el 2004 y mediados de 2019, según los datos de la Mesa Nacional del Transporte que fueron dados a conocer en agosto de 2022.
Durante entrevista con Diario El Salvador, uno de los voceros de la referida mesa, Luis Regalado, dio un balance de las condiciones actuales de seguridad que atraviesa el sector y la implementación de las estrategias gubernamentales, como el régimen de excepción, para combatir a las pandillas.
«Como sector de transporte estamos agradecidos con Dios y segundo darle las gracias al presidente (Nayib Bukele) que tomó esa decisión (…) Sabemos que todo cambio trae una acción, muchos la iban a ver pesada, pero el resultado lo estamos percibiendo todos como pueblo salvadoreño en el sentido que se respira una tranquilidad diferente», expresó.
Atrás quedaron los días en los que el sector era obligado a pagar millones en extorsión, pues bajo la gestión del presidente Bukele este delito se ha logrado eliminar por completo y hasta el desembolso adicional que cada diciembre exigían los pandilleros como «aguinaldo».
PASAJEROS VIAJAN CON TRANQUILIDAD EN LAS UNIDADES
Los planes de seguridad han permitido que rutas como la 41-B, de Soyapango, volvieran a ingresar a colonias como la Monte Blanco donde no lo hacían por temor a las pandillas; hoy lo hacen con total normalidad. Atrás quedaron los días en los que cada vez que un pasajero sacaba su celular era víctima de robo. Actualmente, los usuarios viajan sin ese temor, basta con abordar cualquier unidad para constatar que la mayoría lo hace sin preocupación alguna.
Sobre este punto, Regalado comentó que mantienen estrecha comunicación con los motoristas y que ante la posibilidad de un hecho delictivo o «inconveniente lo trasmiten en el momento».
«Tenemos un bajón (de hechos delictivos) bastante marcado dentro de las unidades del transporte, sí se han dado eventos, pero han sido esporádicos y en la madrugada y nocturnidad, pero el resto del día han sido mínimos los comentarios que se oyen a raíz de un incidente de asalto o hurto», afirmó el empresario.
En el caso de los atentados, el transportista comentó que hace más de un año tuvieron registro de uno, pero que la Policía Nacional Civil (PNC) actuó de manera oportuna para identificar y capturar a los atacantes, consideró que gracias a la operatividad este tipo de hechos dejaron de quedar impunes.
Regalado considera atinada la presencia de soldados y policías en las unidades del transporte como medida de prevención de delitos.
«Eso le da garantía al usuario como al motorista y, aún, a la población en general ver a una persona uniformada que está brindando seguridad. Todo mundo lo quisiera ver a toda hora en diferentes zonas porque les genera confianza sin el temor de que puedan ser víctimas», dijo.
GOBIERNO Y TRANSPORTISTAS MANTIENEN ACERCAMIENTOS
El 85 % de las rutas de todo el país están representadas en la Mesa Nacional del Transporte, la cual mantiene acercamientos con funcionarios del Gobierno para discutir las diferentes propuestas que vayan encaminadas a mejorar la calidad del servicio que se le brinda a la población.
De acuerdo con datos del Viceministerio de Transporte (VMT) en el país existen 1,266 rutas que proporcionan servicio de transporte; los registros oficiales indican que en el territorio circulan 10,150 unidades, de las cuales 6,787 son buses y 3,363 son microbuses.
Luis Regalado expresó que como empresarios del transporte apoyan las medidas para garantizar que el sector desarrolle sus actividades bajo condiciones de seguridad tanto para su personal como los usuarios.
«Como sector hemos apoyado desde un inicio el plan, estamos claros que de no haberse ejercido este tipo de mecanismo seguiríamos en un limbo social de seguridad; hoy podemos respirar tranquilidad», comentó.