Platense salvó los muebles. No ganó, pero evitó la tercera caída al conseguir un sufrido y dramático empate de 3-3 en casa ante Santa Tecla que despreció el triunfo en el tiempo añadido.
Los gallos que venían de dos derrotas al hilo, que debutaron en casa con paliza de 0-3 ante Alianza y luego perdieron 3-1 en Usulután frente a Firpo, tuvieron un arranque esperanzador pues festejaron gol en apenas cinco minutos.
Fue Luis Valladares quien abrió la lata y puso contra las cuerdas a los pericos, pero los problemas para los viroleños también llegaron temprano, el escurridizo volante derecho Elvin Alvarado se pasó la raya en una entrada y fue expulsado antes de cumplirse el primer cuarto de hora.
La pieza menos con la que debió jugar Platense el resto del partido comenzó a pasar factura desde antes de llegar a la pausa. En el 36´, Néstor Raúl Renderos se incorporó en una jugada en ofensiva, se elevó entre los zagueros y decretó el 1-1 tras vencer de cabeza al meta Yimmi Cuellar.
Y luego, para restregar el dedo en la herida, llegó Rafael Burgos, jugador con pasado viroleño, para decretar el 1-2 en el 45’+4’, y poner el camino del complemento cuesta arriba para los gallos.
Reanudadas las acciones de la etapa final, Wilbert Arizala,al 63’, consiguió el 2-2, pero luego sería el mismo zaguero quien cometió penalti sobre Renderos y la pena máxima la transformó en gol César Flores en el ’83.
Parecía que los gallos perderían la cresta por tercer juego consecutivo, pero Wilmer Novoa al 90’+3’ hizo el definitivo 3-3.