Sumado a la playa y a la gastronomía, el bitcóin se convierte cada vez en uno de los mayores atractivos de la playa El Zonte.
La criptomoneda ha disparado el comercio y la curiosidad en esta zona costera desde que el presidente Nayib Bukele anunció que esta tendría curso legal. La periodista de «Diario El Salvador» Sandra Velasco cayó en la corriente de la bitcoinmanía en El Zonte y compró una Coca-Cola en la pequeña tienda Roxy para calmar el calor, mientras era testigo de la fiebre que se ha generado alrededor de los dos cajeros que operan en El Zonte y en El Tunco.
La tienda Roxy es parte de los 45 comercios que aceptan la criptomoneda en El Zonte, verdadero epicentro del bitcóin, no desde hoy, sino desde hace por lo menos tres años, según Jorge Valenzuela, fundador del proyecto Bitcoin Beach. «A la fecha tenemos ese total solo en El Zonte, además de los más de 65 comercios que se han afiliado en San Salvador, pero en el país se siguen sumando más negocios a diario.
Esto quiere decir que esto va creciendo como la espuma gracias a la ley», añadió Valenzuela. Los lugareños aseguran que cada día la afluencia de personas es mayor en las sedes donde se encuentran los cajeros. Uno se encuentra en Café Cocoa, en la playa El Zonte.
Este es de la empresa Athena, el cual opera con opciones de bitcóin, bitcóin cash, litecoin y ethereum. Mientras que el que está ubicado en El Tunco opera con dos tipos de monedas: bitcóin y litecoin. Athena Bitcoin, la empresa estadounidense que instala cajeros de criptomonedas y que posee un cajero en la playa El Zonte, a diario recibía en el Café Cocoa a un máximo de cinco personas, pero con el furor del bitcóin ese número se elevó a más de 40, según Jéssica Véliz, colaboradora del proyecto Bitcoin Beach y responsable de brindar asesoría sobre el funcionamiento del cajero.
«La gente quiere saber cómo funciona el bitcóin, cuáles son los beneficios y por qué nosotros estamos involucrados en esto… Les explico que el precio fluctúa y eso hace que el valor sea menor o mayor».
Jéssica Véliz, colaboradora del proyecto Bitcoin Beach.
El cajero de Athena tiene un máximo diario de retiro y de compra en efectivo de $800, aunque, según la joven, el monto de la transacción puede exceder ese límite, pero ya se utiliza otro procedimiento, que incluye brindar datos más específicos, como el correo electrónico y el número de teléfono para que la empresa se ponga directamente en contacto con el comprador. EL BOOM Para conocer sobre las transacciones, los esposos Garza se hicieron presentes desde Santa Tecla hasta El Zonte, donde fueron a conocer cuál es el proceso para sumarse a la bitcoinmanía.
«Estamos aquí para conocer cómo se debe proceder para adquirir bitcoines, porque no sabemos nada y la verdad es que estamos interesados en el tema porque pensamos a futuro en un negocio donde nos gustaría incorporar este tipo de moneda en los pagos», dijo Daniel Garza.
Mientras una fila de personas esperaba en El Zonte para que Jéssica les brindara información sobre la criptomoneda.
El equipo de este diario se trasladó a El Tunco, donde también se puso a prueba la eficiencia del cajero de la empresa General Bytes, con operaciones en Praga, República Checa y Estados Unidos.
La transacción tuvo éxito tras 20 minutos. Es de destacar que a la fecha se contabiliza más de medio millón de usuarios salvadoreños utilizando dos de las aplicaciones más populares en El Zonte y El Tunco: Strike y Bitcoin Beach Wallet.
Alberto Gabino, mexicano residente en la playa El Tunco, está muy interesado en el bitcóin. «Aspiro a abrir un negocio donde pueda cobrar con esta criptomoneda, ya que yo tengo experiencia en administración de empresas», dijo. Mientras, Joel Flores, quien vive en Antiguo Cuscatlán, llegó a uno de los cajeros a liquidar los puntos que le otorga Strike cada vez que recomienda la aplicación, los cuales se traducen en dólares.
«Me parece interesante el movimiento bitcóin. La verdad, vine a probar cómo podía liquidar mis puntos y funcionó», dijo Flores. Son testimonios que confirman que el bitcóin está creciendo en El Salvador como la espuma.