La tormenta tropical Julia comenzó a causar daños y a poner en riesgo la vida de cientos de salvadoreños desde la noche del domingo, pero las probabilidades por derrumbes, crecidas e inundaciones aumentaron durante la madrugada de este lunes, mientras el sistema ciclónico se desplazaba frente a las costas del país. El Salvador se mantiene en alerta roja ante la emergencia nacional.
Mientras las primeras horas de este lunes pasaban, las lluvias en todo el territorio nacional se incrementaban causando mayores afectaciones, sobre todo en la zona del oriente del país. Las comisiones municipales de Protección Civil de los departamentos de La Unión, San Miguel, Usulután, San Vicente, Cabañas, Santa Tecla, entre otras, ejecutaron el plan de evacuación para poner a salvo a varias familias en riesgo, muchas de ellas de manera preventiva para evitar lamentar perdidas mortales. En otros casos tuvo que rescatarse a varias personas por los elevados niveles de agua cerca de sus viviendas y el peligro de crecidas y derrumbes.
Pasados algunos minutos de la 1 de la madrugada, las autoridades de Gobierno evacuaron a familias en la zona de Puerto Cutuco, cerca de quebrada Los Monos, en La Unión. Otros padres y sus hijos fueron trasladados hacia el albergue ubicado en la Casa Comunal del municipio La Alegría, en Usulután, el cual fue equipado previamente para brindar la atención necesaria a las personas en riesgo.
Por su parte, el presidente de la Comisión Departamental de Protección Civil de Usulután, Héctor Valle, junto a la vicegobernadora, Johana Hernández, realizaron evacuación preventiva de familias de colonia Las Américas y caserío Las Pilas, también en Usulután.
La Unión fue uno de los departamentos más afectados y a esa zona del país, y a otros sectores, se hizo presente durante la noche el ministro de Gobernación, Juan Carlos Bidegain, junto con los directores de Protección Civil y del Cuerpo de Bomberos, Luis Amaya y Baltazar Solano, para verificar la atención integral de los albergues. «Me alegra mucho que hayan tomado esa sabia decisión de salvaguardar la vida de sus familias. Como Gobierno del presidente Bukele estábamos preparados, pero era necesario tener la colaboración de todos ustedes para que hicieran uso de este servicio», dijo el funcionario en el albergue de Las Tunas.

«Mandamos un mensaje a las personas que aún no han decido hacer uso de los albergues, las lluvias ya comenzaron y es importante que sigan las recomendaciones que estamos haciendo. Así como estas familias tuvieron la sabiduría de salir de manera preventiva, hacemos el llamado a las familias que hacen falta. Hemos evacuado bastante, pero queremos llenar los más de 80 albergues que tenemos y eso significa que van a tener mejor protección mientras pasa la tormenta. Tenemos equipo desplegados en todo el territorio precisamente para darles ese servicio», explicó el ministro.
Además, la gobernadora de Cabañas, Rita Amaya, como presidenta de la Comisión Departamental de Protección Civil de Cabañas, realizó monitoreo en la zona de Cantón Santa Rosa, Caserío Los Cea, de Sensuntepeque, Cabañas, donde visitó a diferentes familias de escasos recursos que viven a la orilla del embalse. La funcionaria verificó los niveles del agua en el Vado de Lagarto, en el Municipio de Dolores.
Al cierre de esta nota, las autoridades también trabajaban atendiendo emergencias en San Salvador y en La Libertad.