Hace unas semanas escribí un artículo titulado «El caballo de Troya del FMLN», donde se hizo ver que ese partido político, antes de entregar el gobierno en 2019, luego de haber sufrido una estrepitosa derrota electoral, había preparado el camino y la estrategia de desestabilización como buen estratega y con experiencia en destruir el país.
Lo anterior es de generales conocido y justo eso ha hecho: aprovecharse desde dentro de las instituciones de Gobierno, al haber nombrado, meses antes, al menos a 40,000 personas ligadas al FMLN, quienes serían sus peones de lucha de calle, lo cual es su especialidad.
Además, ahora cuenta con su aliado incondicional, el partido ARENA, con el pretexto de una lucha contra «la dictadura, la persecución política y la represión».
Ese fue el libreto utilizado en los años setenta y principios de los ochenta, cuando fundaron la Coordinadora Revolucionaria de Masas (CRM). El mismo Medardo González, exsecretario general del FMLN, reconoció que las marchas de aquella época eran gloriosas y nada tienen que ver con lo actual, pero pretenden, mediante ese libreto, tomar oxígeno para sus trasnochadas pretensiones de volver al poder, utilizando los mismos métodos del pasado.
Hay que entender ese andamiaje político, el cual está envuelto en una estrategia de desestabilización y provocación que va hacia otro nivel, y es que, como en el pasado, buscan su primer «mártir de lucha», cosa que no veo posible, pues la Policía Nacional Civil (PNC) y la Fuerza Armada de El Salvador (FAES) tienen muy claro lo que pretenden y no caerán en provocaciones y se mantienen apegados a la ley.
Ya que la verborrea de los presos y los perseguidos políticos no les funcionan, mediáticamente hablando, lo que buscan por medio de sus grupos de choque es crear una burbuja de un país polarizado. Esto dista mucho de la realidad objetiva.
Estos actos de confrontación han pretendido llevar a las altas autoridades del Ministerio de Educación a un terreno que gente de ARENA-FMLN y sus ONG de fachada manejan a la perfección; es decir, destruir en vez de construir, donde se buscó enfrentar a la actual ministra con sus dirigidos, es decir, el gremio docente, sacando de contexto palabras y poniéndolas en perspectiva de una directa confrontación, y se recurre al manoseo mediático que en un primer momento generó confusión entre el gremio docente, mismo que en las elecciones presidenciales y de diputados y alcaldes votó por Nuevas Ideas y GANA, aniquilando políticamente al FMLN e hiriendo de muerte a ARENA. Como se sabe, una bestia herida es mucho más peligrosa, y ante ese panorama nos encontramos.
La ministra de Educación tiene claro el mandato que el presidente le asigna y es el de aplicar un proceso de reingeniería en nuestro sistema educativo, acciones que no caen en gracia de algunas gremiales magisteriales que se dedican a criticar y buscan desacreditar los esfuerzos de un gobierno visionario y, a la vez, resiliente, el cual, pese a estar inmerso en una pandemia, saca a flote a nuestro país con indicadores muy superiores a los de gobiernos anteriores, sin que estos tuviesen un fenómeno como la COVID-19; algunos incluso pensaron que el país caería, pero ocurrió todo lo contrario.
Es importante dejar claro que el sistema educativo, pese a las críticas de los troyanos, sigue con un paso firme y galopante, con la vista puesta en una estrategia de desarrollo, donde se busca reducir la brecha digital y, por consiguiente, con la entrega de computadoras a estudiantes y docentes, así como la actualización y el perfeccionamiento docente por medio de capacitaciones en el uso de tecnologías de punta, colocar a El Salvador como uno de los países latinoamericanos con más logros tangibles en materia educativa.
Para finalizar este análisis, el cual comparto por medio de estas líneas, dejo al descubierto una estrategia iniciada desde el interior de las instituciones de Gobierno para generar caos y así pretender ganar adeptos para buscar incrementar su lucha callejera y, no está de más mencionarlo, que muy probablemente algunos pudiesen creerse el cuento, aunque más del 90 % de la población rechaza a partidos con ideologías rancias, anacrónicas y fallidas en nuestro país.
Esta situación amerita tener mucha orientación y educación, y a la vez conocimiento político para no ser engañados por grupos de choque y por gente que perdió el poder político y buscan recuperar lo que el pueblo les quitó en las urnas.
El caballo de Troya está en marcha, formado por personas que lactan del Gobierno y que ahora suenan sus tambores de confrontación.
Señora ministra, adelante, cuenta con el apoyo del sector docente pensante.
Señor presidente Bukele, pasará a la historia como el prócer de la educación de última generación.
