Rodolfo Lazo es una de las tantas personas a las que la pandemia de la COVID-19 le cambió la forma de generar ingresos económicos para su familia, ya que pasó de ser un motorista de un microbús de transporte escolar a pasar buena parte de su tiempo en una lancha recorriendo constantemente la bahía, el golfo y las islas de La Unión.
A raíz de la pandemia hubo un cierre de todas las instituciones educativas y las clases pasaron a darse en la modalidad en línea, por lo que ya no hubo demanda de transporte escolar, pero Rodolfo debía generar ingresos y buscar otras alternativas de trabajo.
Este hombre, de 48 años, originario de la ciudad-puerto, ahora cuenta con una lancha que ofrece servicios de transporte marítimo y paseos en lancha para las personas que llegan a explorar el golfo de Fonseca y sus islas. «Yo me crie en el mar, pero ya trabajando como guía turístico tengo tres años, y puedo decir que fue la pandemia la que me dio un giro de 180 grados, porque yo hacía otra cosa, pero ahora caí en lo del turismo», contó Lazo.
En temporada baja de turismo, Rodolfo espera a los clientes que llegan al parque de La Familia o al muelle Los Coquitos, pero en temporada alta, como en vacaciones, suele ser contratado por turoperadoras para brindar el transporte y guiar a los turistas nacionales y extranjeros que llegan a esta zona.
Él se encarga de ayudar a los turistas a subir en la lancha, les da indicaciones y recomendaciones que deben seguir adentro del mar, como colocarse el chaleco flotador, por si sucede algún percance. Y luego comienza su trabajo de ir explicando cada sitio que se va explorando o respondiendo las interrogantes de las personas.