El archivo personal y acervo artístico de Salvador Salazar Arrué como cuentista, novelista, pintor y músico puede ser contemplado a través de un archivo documental que contiene manuscritos de su obra literaria, objetos, fotografías, obras de arte, biblioteca personal y registros sonoros que resguarda el Museo de la Palabra y la Imagen (MUPI) y que comparte con la Casa del Escritor y Museo Salarrué.
La colección integra una parte de la obra plástica del artista, compuesta por 108 piezas, entre pinturas, bocetos, dibujos y esculturas.
Dentro del legado también se encuentran 300 piezas que son obras creadas por su esposa Zelié Lardé y sus hijas, Olga, Maya y Aída, como pinturas, dibujos y producción literaria.
El archivo posee, además, un registro fotográfico de la vida familiar, de su obra pictórica y escultórica y también una biblioteca personal que cuenta con 2,000 títulos, entre libros y revistas en español e inglés.
Concretamente, el archivo personal lo integran aproximadamente 1,700 documentos escritos. Estos han sido divididos en dos fondos generales: correspondencia particular y producción literaria.
La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) declaró como Patrimonio Documental las obras Salarrué, entra las que destacan «Cuentos de Barro», «Cuentos de Cipotes» y «El Cristo Negro».
El legado Salarrué fue incorporado en el registro del Programa Memoria del Mundo en el año 2016, como parte de la decimoséptima reunión anual del comité regional para América Latina y El Caribe.