Desde que salió de El Salvador hacía Guatemala, el timonel sub-17, Juan Carlos Serrano, dejó claro que no tenía dos puntos en su contra, sin que eso sonara a excusa.
El primero es que no hay un torneo sub- 17 de donde se puedan escoger jugadores para este combinado infantil. Los equipos de primera división ahora solo cuentan con su torneo sub-20 o categoría de reserva.
Luego, el segundo fue el poco tiempo de preparación que tuvo ese seleccionado nacional. Apenas fueron cuarto meses con cuatro fogueos que dejaron muchas cosas para corregir en el equipo nacional.
Con esos puntos adversos, El Salvador fracasó ante México, en la búsqueda por el boleto al Mundial de Perú. México se impuso por 3-0 con su jerarquía y demostró una vez más todo su trabajo sistemático en niveles formativos.
Serrano dijo que quería competir ante los mexicanos. Lo intentó hacer, pero se vio superado por el rodaje de los aztecas, que ya inscribieron su nombre en el próximo Mundial de la categoría.
Habrá que ver ahora si la Fesfut logra sostener a este grupo, para empezar a perfilar a la nueva sub-20, combinado que también se quedó con las manos vacías en el Premundial de Honduras, el año pasado.
La sección sub- 17 regresa este miércoles a El Salvador con la incertidumbre de qué hará la Fesfut con este plantel. Serrano, por su parte, tendrá que ir a ayudar a Édgar Henríquez con la preparación de la sub-22 para los Juegos Centroamericanos y del Caribe San Salvador 2023, que se realizarán mayo y junio.
En el arranque, El Salvador jugó sin complejos ante México, pero como lo había venido diciendo el seleccionador sub- 17, Juan Carlos Serrano, estaba ahí de frente ese temor a equivocarse por parte de sus jugadores.
Ese temor apareció al minuto 18, cuando Stephano Carrillo apareció para poner en ventaja a México por 1-0.
Pese a gol de los aztecas, el equipo nacional siguió haciendo su partido. Puso el balón al piso con Nelson Díaz para generar llegada por el flanco derecho.
Pero en medio de ese entusiasmo de la Azulita, llegó el segundo tanto por intermedio de Urías. Ese gol caló en el ánimo del equipo cuscatleco, que lo estaba haciendo bien hasta el 1-0.
Luego, el tercero de México llegó al 70. Urías hizo daño de nuevo en el arco cuscatleco, que se vino a menos desde la segunda conquista de los aztecas.
En efecto dominó se vino a menos el equipo salvadoreño. El 3-0 era lapidario. Para la sub-17 todo fue bueno mientras duró el sueño. Ahora todo se acabó y se suma un fallo más al historial de combinados formativos.