Con el objetivo de impactar en la conservación del medio ambiente, la Asociación Azucarera de El Salvador, la Fundación del Azúcar (Fundazucar), Iberplastic y la Asociación de Proveedores Agrícolas (APA), firmaron un convenio que integra a las operaciones del sector a la economía circular.
El acuerdo posibilita el fortalecimiento del programa «Gestión de desechos sólidos derivados de agroquímicos», con el que se facilita la recolección y transformación de envases vacíos de agroquímicos en productos de limpieza. De esta forma, un desperdicio podrá convertirse en materia prima para un nuevo producto.
«A nivel mundial se está evolucionando de una economía lineal a una economía circular y este programa de la agroindustria azucarera de El Salvador es un ejemplo del cambio que se está realizando en el país y de cómo el sector azucarero se suma a estos cambios», dijo Tomás Regalado Papini, presidente de Fundazucar.

De acuerdo a los dirigentes de los entes firmantes, la iniciativa ya beneficia al medio ambiente al reducir la presencia de los envases de agroquímicos en las fuentes de agua y suelo. Asimismo, minimiza los efectos adversos en la salud humana.
En su primera fase durante el año 2021, cerca de 33,381 libras de envases vacíos de agroquímicos procedentes de la agricultura fueron transformadas en 53,127 escobas, de las cuales el 23 % corresponden al cultivo de caña de azúcar a escala nacional.
A la fecha, se han habilitado tres centros de acopio en Sonsonate, Jiquilisco y San Miguel, además de tres puntos de recolección ubicados en Jiquilisco, El Tránsito y San Dionisio, con los que el sector azucarero espera lograr la recolección del 100% de insumos utilizados por la cadena de valor.
Debido a que el sector azucarero solo representa el 10 % del área que se cultiva a nivel nacional, con el nuevo proyecto las distintas organizaciones que conforman la alianza buscan servir de inspiración para otros sectores y de esta forma lograr un impacto mayor.
«La gestión ambiental responsable, implementada a través de este programa, conlleva incorporar un elemento más de patrones de producción sostenibles en la agroindustria azucarera salvadoreña», agregó Papini.