El impacto de la pandemia COVID-19 es protagonista en las mediciones económicas de organismos y grupos empresariales en todo el mundo, en el país la historia no es diferente, de esta forma lo desveló el cuarto Informe de Desempeño Económico y Normativo de Asociación Salvadoreña de Industriales (ASI).
Derivadas de la contención por la crisis sanitaria, las restricciones de movilidad, cierre de comercio y otras medidas que pausaron la actividad productiva generan una caída de la economía mundial del 4.4 % y en El Salvador, la cifra es del 9 % que junto a Panamá es la más importante de la región.
EL EMPLEO
Este quiebre de la economía impacta directamente en los empleos, según la ASI, el empleo formal en septiembre de 2020 fue de 810,899 puestos laborales, lo que significa 56,799 menos que los que se contabilizaban en septiembre, indicó la gerente de Inteligencia Industrial de ASI, Karla Domínguez.
De la cifra total, la industria generó el 21.7 % de los empleos que significan 175,00 puestos de trabajo, la disminución reportada en septiembre es de 12,000 en comparación con enero de este año.
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Aunque muchas empresas vieron mermadas sus actividades y algunas suspendieron contratos, realizaron despidos o tomaron otras alternativas, hubo dos sectores industriales que crecieron su oferta laboral en medio de la contingencia, plásticos y energía eléctrica.
Los plásticos reportaron en septiembre 8,209 empleos, es decir 181 más que lo que se tenía en enero, con una tasa de crecimiento 2.3 %, entretanto el sector eléctrico reportó 3,893 puestos laborales, 91 trabajos más, es decir un crecimiento del 2.4 % comparado a enero.
Pero hay otros que aún recienten las implicaciones económicas de la pandemia, indicó Karla Domínguez.
«En la industria manufacturera, los dos sectores más afectados fueron textil y confección y alimentos», añadió.
La caída en septiembre en comparación de enero para textiles es 74,000 empleos y en alimentos es 27,000. Otros sectores que redujeron su oferta laboral son papelería, metalmecánica, farmacéutico, muebles, industria azucarera, entre otros.
«Las cifras pudieron ser mejores, lamentablemente lo de la pandemia nos ha botado todo a todos, yo creo que este año (2021) va el año del mantenimiento, el año del sostenimiento. Haber solventado todas las dificultades que hemos tenido ha sido positivo»
Eduardo Cader, presidente de la ASI.