Las personas que consumen tabaco tienen un doble riesgo de desarrollar un cuadro grave de COVID19 si se llegaran a infectar, informó el doctor Ottoniel Sánchez, coordinador del programa de Hábitos Saludables, del Fondo Solidario para la Salud (Fosalud).
Según el especialista, el metabolismo del tabaco daña la materia pulmonar de las personas, es decir, el neumocito. Por lo tanto, provoca el mismo daño que el virus de SARS-CoV-2 en dichos órganos. De manera que una persona que consume tabaco y se infecta de coronavirus, tiende a sufrir un doble daño en los pulmones.
«Un paciente que tiene ya de por sí un déficit pulmonar y presenta una enfermedad que aumenta el daño pulmonar, como la COVID-19, terminará con cuadros más graves. Si comparamos un paciente que fuma con otro que no, y a ambos les da coronavirus, quien va a desarrollar un cuadro grave es el fumador. Eso es un grave factor de riesgo», comentó el médico.
Además, el consumo de tabaco debilita la función pulmonar. Según Sánchez, si se compara el nivel de oxígeno entre las personas mientras consumen tabaco con las personas que tienen cuadros graves de coronavirus, se reflejará que en ambos casos la cantidad de oxígeno en la sangre disminuye.
«Ambos deterioran la función pulmonar, y un pulmón que está debilitado, dañado previamente, que todavía tiene cicatrices por el tabaco, cuando recibe la COVID-19, las lesiones son más graves, porque es como que ya se tuviera una herida abierta y va a hacer más estragos que una persona que nunca ha fumado», explicó el especialista.
Pero el daño en los pulmones no es solo en el momento que se consume tabaco, ya que esta práctica ocasiona lesiones a largo plazo en los órganos. Se han documentado casos de personas que desarrollan una enfermedad pulmonar obstructiva crónica posterior al consumo de tabaco, la cual es grave porque disminuye la oxigenación de forma permanente.
El doctor sostuvo que entre más prolongado es el consumo del tabaco, más daño pulmonar se produce, ya que hay mayor exposición a esas toxinas.
De igual forma, la Organización Mundial de la Salud (OMS) compartió un comunicado en mayo de 2020, donde explicó que, tras revisar diversos estudios, un grupo de expertos en salud pública determinó que los fumadores tienen más probabilidades de desarrollar síntomas graves en caso de padecer la COVID-19 en comparación con los no fumadores.
Por esto el médico reiteró la importancia de que los fumadores dejen el tabaco por ser un factor de alto riesgo al enfermar de la COVID19.
«Si alguna persona quisiera buscar el mejor momento para dejar de consumir tabaco es este, porque los efectos prácticamente son inmediatos. La presión arterial se normaliza a las pocas horas de dejarlo, la oxigenación da una muestra de mejoría en la flexibilidad pulmonar», expresó Sánchez.
ENFERMEDADES
Existen alrededor de 25 enfermedades directamente relacionadas con el consumo de tabaco, incluidas el cáncer y las cardiopulmonares que conllevan a la muerte prematura.
«Una muerte prematura es alguien que muere a los 45 años por consecuencia del tabaco, lo cual es grave, porque se generan enfermedades como cáncer pulmonar, cáncer de lengua, faringe o laringe a consecuencia de un solo producto», expresó el médico.
El especialista también indicó que se debe trabajar en la prevención del consumo de tabaco en poblaciones jóvenes, ya que tienden a desarrollar mayor adicción a la sustancia.