El Salvador se ha posicionado en los últimos años como uno de los principales proveedores de textiles de Estados Unidos, según datos de la Oficina de Textiles y Ropa del Departamento de Comercio de Estados Unidos (Otexa), que reportó que, en 2021, el país fue su segundo mayor vendedor de calcetines de fibra sintética.
En este sentido, la directora ejecutiva de la Cámara de la Industria Textil, Confección y Zonas Francas de El Salvador (Camtex), Patricia Figueroa, destacó la importancia de la alianza comercial entre ambos países, e indicó que la gremial se encuentra inmersa en un importante trabajo para abrir aún más espacios para la comercialización de los productos salvadoreños.
«Hemos estado en innumerables reuniones con las marcas tratando de promover un compromiso a más largo plazo. Hemos tenido un alto nivel de presencia en el Congreso, el Senado y la Administración de los Estados Unidos con muy buenos resultados sobre el tema de mantener la regla de origen del Tratado de Libre Comercio entre Centroamérica y los Estados Unidos (CAFTA)», afirmó Figueroa.
Detalló que los acercamientos a nivel del Senado y Congreso de ese país tienen por objetivo impulsar la generación de incentivos para las empresas que expandan y traigan nuevos proyectos a El Salvador y a la región centroamericana.
«Esto es parte de las diferentes iniciativas de ‘nearshoring’ que es del interés de los Estados Unidos, pero también es de nuestro interés, por ello hemos tenido una presencia constante con más de tres visitas empresariales a Washington», dijo la vocera de la gremial.
En este contexto, Figueroa informó que, fruto de su trabajo como representante de El Salvador y Centroamérica ante el mercado de textiles estadounidense, importantes empresas anunciaron compromisos para establecer contratos en la región durante los próximos años.
«Ya ellos anunciaron compromisos de poner contratos en la región para los próximos 10 y 20 años, al menos dos de ellos, y esto se va a estar anunciando prontamente, y naturalmente, si bien el compromiso es con la región, indiscutiblemente parte de ello llega a El Salvador», aseveró.
Respecto a ello apuntó que, uno de los principales elementos que están evaluando las marcas para invertir en el istmo es que el sistema de producción funcione de forma sostenible, que presenten trazabilidad desde el algodón hasta el producto final, y por ello, la gremial trabaja en el posicionamiento de las empresas nacionales en el cumplimiento de los índices ambientales exigidos.
De igual forma, destacó la inversión que empresas del sector ejecutan en El Salvador para dar cumplimiento a esta exigencia y así competir en igualdad de condiciones con el resto del mundo.
«Estados Unidos continúa siendo nuestro principal socio, por eso es que mantenemos una fuerte alianza como gremial con las diferentes autoridades que rigen el tema textil en los Estados Unidos y con el sector privado, con el cual realmente formamos una cadena única de producción en el hemisferio occidental», concluyó Figueroa.