Tres especies de lobos marinos han llegado a las costas salvadoreñas, según los registros. Estos son el lobo fino de California, el lobo fino de Guadalupe y el lobo fino de Galápagos. En el país se han documentado individuos vagantes o solitarios fuera del territorio de distribución.
Los casos están relacionados con el fenómeno de El Niño, que genera el aumento de aguas cálidas en el océano Pacífico, y estas especies marinas son de aguas templadas y prefieren los hábitats rocosos y las cuevas sombreadas. «Las tres especies dependen del agua fría para sobrevivir y son altamente vulnerables a los eventos de fluctuación natural de las temperaturas superficiales del mar y al comportamiento de la atmósfera, lo que ocasiona los eventos de El Niño y La Niña», indicaron técnicos del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN).
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Recientemente, han documentado avistamientos en el país. Uno de los últimos casos fue el de una hembra de Galápagos que se recuperó durante dos semanas en la clínica del MARN; posteriormente, fue liberada en un área natural protegida. De acuerdo con el MARN, las tres especies miden más de 1 metro, de los que el lobo de California es el más grande, pues alcanza 2.4 metros de longitud.
Esta especie, junto al lobo fino de Guadalupe, se distribuye a lo largo de la costa nororiental de Estados Unidos. Por su parte, el lobo de Galápagos se establece en el Pacífico de Sudamérica. Los lobos se diferencian de las focas porque tienen las orejas visibles y caminan sobre la tierra, ya que las extremidades posteriores son funcionales para desplazarse, aunque son mejores nadadores.
Tienen una capa de grasa bajo la piel y sus bigotes aumentan el sentido del tacto. Estas especies se encuentran en peligro de extinción, ya que en el pasado fueron perseguidas para cazarlas. La especie de Galápagos se encuentra clasificada en peligro por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). Algunas de las principales indicaciones para la población al avistar a estos animales en las playas es no acercarse, no tomar fotografías y reportar inmediatamente a la Policía Nacional Civil.