Una de las cuentas de Twitter que mayor aceptación tiene entre los salvadoreños es la de Cuerpo de Bomberos de El Salvador. Desde reportes de incendios o accidentes hasta anécdotas e historias interesantes sobre casos peculiares de emergencias, esta cuenta ha logrado conectar con los usuarios de Twitter en el país y fuera de él a través de ese tipo de temas.
Sin embargo, en los últimos años, una de las cosas más frecuentes que se ven en dicha cuenta son los hallazgos de serpientes en diferentes viviendas de todo el país, sobre todo, en San Salvador. Constantemente, Bomberos atiende este tipo de emergencias y hacen un llamado a tomar las medidas más adecuadas en caso se encuentre este tipo de reptiles en los hogares.
Pero, si encuentro una culebra, ¿qué no debo hacer?
Álex Antonio Sánchez, un bombero destacado en la Estación Central de San Salvador, lleva más de una década atendiendo los hallazgos de serpientes y señala que el error principal que la mayoría de la población comete es actuar de forma indebida al encontrar este espécimen en sus viviendas.
«El primer error es golpearlas y ahuyentarlas de forma violenta. Comúnmente la gente las ve y quiere arrearlas. Les tiran piedras, palos o la única intención que tienen es matarlas; y tal vez es una boa constrictor, que no es agresiva y lo que hace es huir», comentó.
Por ello, en caso de encontrar una serpiente en su casa, recuerde estos aspectos importantes sobre cómo debe actuar en ese momento:
Identificar la serpiente
No todas las serpientes que aparecen en los hogares son venenosas. Por eso, es clave saber identificarlas para tomar las medidas correspondientes. En el caso de las venenosas, las características más frecuentes que presentan son: pupila en forma de ovoide (es decir, no es circular), cabeza redonda y escamas grandes, cola alargada y delgada y no poseen colmillos delanteros.
Por su parte, las constrictoras (no venenosas) tienen la pupila de forma elíptica y la cabeza es triangular con escamas pequeñas. La cola de este tipo de serpientes es corta y gruesa y poseen colmillos delanteros retráctiles.
Con estos puntos claramente identificados es más fácil saber a qué tipo de serpiente se enfrenta, tomando en cuenta que la recomendación más importante siempre será la de no atacar al animal ni perseguirlo de forma desordenada.
Llamar a las autoridades indicadas
Tras identificar a la culebra encontrada, lo ideal es llamar a las autoridades responsables que, en estos casos, son el Ministerio del Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) y la Policía Nacional Civil (PNC) en su división ambiental, las cuales se encargarán de atrapar el espécimen y llevarlo a los refugios ya destinados para estas situaciones.
No atacar a la serpiente ni intentar atraparla
Las serpientes tienden a reaccionar según su entorno. Según Sánchez, debido al afán de las personas en querer eliminarlas o capturarlas sin tener ninguna protección y desconociendo la especie, es que se producen los ataques de serpientes a personas. Por ello es importante saber cómo proceder para atrapar al espécimen para luego liberarlo en una zona boscosa o entregarlo a Bomberos.
Lo primero es identificar la especie y, una vez hecho, llamar al 913 del Cuerpo de Bomberos. Mientras Bomberos está en camino a su vivienda, procure guardar su distancia de la serpiente y no atacarla o intentar capturarla usando la fuerza o sus manos.
Lo ideal es dejar que la serpiente permanezca en un solo lugar o que siga su trayecto, ya que mientras no se sienta amenazada no se movilizara demasiado ni buscará agredir a nadie. Además, debe tomar en cuenta el tamaño y peso de la serpiente, ya que mientras más grande sea, más agresiva puede volverse si se siente amenazada. Además, los especímenes venenosos tienden a ser más agresivos que las constrictoras.
¡Ojo: son ejemplares protegidos por ley!
Las serpientes son consideradas vida silvestre en El Salvador y en todo el mundo. En el país, el artículo 2 de la Ley de Conservación de Vida Silvestre establece que “Se entiende por vida silvestre las especies de la diversidad biológica que viven y se reproducen independientemente de la mano del hombre…ya sean éstas terrestres, acuáticas o aéreas, residentes o migratorias y las partes y productos derivados de ellas”.
El artículo 4 de la misma ley define que se considera como “cacería” a “todo acto de captura o recolección, viva o muerta de ejemplares de la vida silvestre y toda actividad asociada con la misma, ya sea para uso o consumo personal o para transferencia o venta a otras personas”, especificando que puede ser con o sin fines de lucro.
Por lo tanto, todo animal de la vida silvestre (culebras o serpientes entre ellos) no debe ser capturados ni puesto bajo cautiverio. El artículo 25 califica como falta leve la captura de un espécimen silvestre, señalando en el artículo 27 que la sanción es una multa de entre uno a diez salarios mínimos.