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Un reciente estudio de la Organización Mundial de la Salud (OMS) reveló que la tardía reacción y la mala administración de México ante la pandemia del coronavirus han sido responsables de la muerte de al menos 190,000 personas. Es decir, la sociedad mexicana habría salvado muchísimas vidas si hubiera tomado acciones preventivas y actuado más rápido. Ahora vemos que en muchas partes del mundo se están retomando los confinamientos y las restricciones en espacios públicos, y eso a pesar de que en naciones desarrolladas el proceso de inmunización va muy avanzado. No obstante, debido a que mucha gente todavía no asimila que la vacunación es una parte complementaria de las medidas de prevención, en esos países ha habido una segunda, tercera e incluso una cuarta ola de contagios, con el subsecuente aumento de fallecimientos por COVID-19.
Desde antes del inicio de la pandemia y de que el coronavirus llegara al territorio salvadoreño, el Gobierno del presidente Nayib Bukele tomó medidas para prevenir el contagio. En algún momento estas acciones fueron calificadas de alarmistas o exageraciones, y se creía que lo único que se buscaba era controlar la circulación de los ciudadanos y restringir las libertades. Incluso se llegó al extremo de presentar reclamos por privaciones de libertad en relación con los ciudadanos que habían violado la cuarentena. En todo el mundo, el confinamiento ha tenido una serie de respaldos legales que han permitido a las sociedades controlar la propagación del virus, como complemento a las medidas de bioseguridad, como el lavado de manos y el uso de mascarillas y alcohol en gel. Sin embargo, en El Salvador vimos a la oposición encargándose de quitar las herramientas que en otras naciones fueron vitales para contener la enfermedad.
A pesar de todos los bloqueos políticos, El Salvador ha demostrado un buen manejo de la pandemia, algo que incluso ha reconocido la OMS. Producto de ello es que se reportaron menos contagios y decesos en comparación con el resto de la región.
Ahora, el Gobierno del presidente Bukele anuncia otra medida osada con el lanzamiento del megacentro de vacunación, en el que podrán atender hasta a 10,000 personas al día. Esto, sin duda, aumentará la inmunización en el país a un ritmo acelerado y permitirá que tengamos una protección más amplia en poco tiempo; sin embargo, implica seguir manteniendo las medidas de prevención para una mayor efectividad.