La empresa AES El Salvador continúa beneficiando a sus clientes a escala nacional, para lo cual en los últimos años ha invertido en tecnología de comunicación para optimizar el servicio de 1.5 millones de familias salvadoreñas.
La distribuidora indicó que, durante 2022 y 2023, destinó $3.3 millones para la creación de un anillo de telecomunicaciones para monitorear en tiempo real sus 85 subestaciones de distribución eléctrica, agilizando así la atención y solución, en el menor tiempo posible, de las contingencias que podrían presentarse.
Asimismo, detalló que las diferentes distribuidoras de energía AES CAESS, AES CLESA, AESS EEO y AES DEUSEM modernizaron su sistema de comunicaciones para garantizar la confiabilidad del servicio, permitiendo CDT agilizar de procesos.
«Con la modernización de la infraestructura de comunicación por medio de fibra óptica, las empresas distribuidoras garantizarán la confiabilidad del servicio a través de un sistema de monitoreo de los equipos eléctricos que son telecontrolados», afirmó la empresa por medio de un comunicado.
Según informó AES, la tecnología de telecontrol permite que todo equipo instalado en las subestaciones de distribución pueda ser monitoreado y controlado correctamente de manera remota y en tiempo real, garantizando así la atención oportuna y ágil de cualquier interrupción que pudiese presentarse en el suministro de energía.
Hasta la fecha, según la compañía, este es el proyecto más relevante en términos de inversión y número de clientes beneficiados que han realizado en tecnología de comunicaciones.
En ese sentido, AES El Salvador aseguró que continúa transformándose para adaptarse a las nuevas realidades del sector energético y a las necesidades cambiantes de sus clientes, acelerando, así, el futuro de la energía.
Por otra parte, comentó también que el año pasado modernizó las líneas eléctricas donde se destinó $2.4 millones en llevar este beneficio a más de 3,500 clientes por medio de la ejecución de 50 proyectos.
Asimismo, la empresa destacó que continúa expandiendo las redes de distribución eléctrica en zonas rurales del país para garantizar que el vital recurso energético llegue a más salvadoreños, por lo que invirtió $1 millón en más de 25 proyectos de electrificación rural que beneficiaron a aproximadamente 700 familias.