Tras la participación de los tres equipos salvadoreños en la Copa Centroamericana de Concacaf, de parte de los directivos y las altas autoridades debería haber un análisis exhaustivo del papel que se hizo.
La imagen del balompié cuscatleco quedó más pisoteada la noche de este miércoles. Además de no conseguir buenos resultados de visita ni en casa, los equipos nacionales fueron goleados. Jocoro y FAS terminaron sotaneros de sus respectivos grupos y Águila apenas acabó penúltimo.
Los emplumados bajaron el telón de una pobre representación salvadoreña en el torneo regional. Esta noche, en el estadio Olímpico Metropolitano, de San Pedro Sula, en Honduras, el Real España que pasa horas bajas en la liga catracha y también eliminado del certamen regional, lo goleó con cartones de 3-0.
Las excusas pueden sobrar, argumentos hay pocos. Lo cierto es que el fútbol cuscatleco pasa uno de sus peores momentos de la historia.
Aguantó 45 minutos
Después de jugar un buen primer tiempo, codeándose con el Real España, Águila se cayó en la segunda parte y lo vacunó Ramiro Rocca, un viejo conocido de nuestro país porque jugó para Chalatenango.
El delantero argentino llegó para el complemento y apenas tenía tres minutos en la cancha (48′) y ya festejaba su primer gol sobre la portería que fue encomendada a Benji Villalobos, quien tenía mucho tiempo sin ser titular.
El artillero suramericano llegó con las luces encendidas al partido y no tardó mucho en ampliar la ventaja, ya que al minuto 64 decretaba el 2-0 a favor del equipo catracho.
Águila no tuvo reacción nunca. Se halló con un muro en tres cuartos de cancha que le impedía avanzar hacia el arco contrario.
Quien sí pudo volver a festejar fue Ramiro Rocca, que en su tercer intento por anotar lo consiguió y selló la victoria de Real España con pizarra de 3-0 para al fin acabar con la pesadilla que vivieron los equipos salvadoreños en Copa Centroamericana de Concacaf.