En conferencia de prensa, el ministro de Salud, Jeyson Auza, explicó que todos los departamentos bolivianos experimentaron un descenso de nuevos casos, con lo que se consolidó la novena semana consecutiva de desescalada, según los datos del reporte epidemiológico.
«Esta semana se han reportado 727 casos, son 344 menos que la semana anterior, esto representa una disminución del 32 por ciento, estamos cerrando la novena semana consecutiva de descenso de casos», subrayó el funcionario.
Auza recordó que la semana 51 de la sexta ola de la pandemia en Bolivia se alcanzó el pico más alto de contagios, con 16.836, aunque, destacó, se mantuvo una tasa de letalidad del 0,1 por ciento.
De acuerdo con la cartera sanitaria, la gestión integral y la aplicación del plan de prevención, contención y mitigación, apuntalada por la vacunación, permitió reducir 62 veces la tasa de letalidad desde la primera ola de contagios (6,2 por ciento) hasta la actual sexta ola (0,1 por ciento).
Bolivia vive desde el 2022 una «nueva normalidad» que progresa este 2023 y acumula, desde el inicio de la pandemia en el país en marzo de 2020, 1.192.933 casos de COVID-19, de los cuales 1.157.318 se recuperaron y 22.365 fallecieron.