Cuando la oposición vio que no podía ganar, comenzó a soñar. Y es que soñar no cuesta nada, basta con recostarse en un cómodo lugar y echar a andar la imaginación. Además, dentro de sus sueños hacen posible lo que en la vida real no pasa de ser una loca fantasía.
Algunos de estos suelen imaginarse sentados frente a una gran pantalla en la que ven un documental en el que fuerzas especiales de la comunidad internacional derrocan al actual Gobierno. Acto seguido, ellos son llamados y puestos nuevamente en el poder. De allí en adelante vuelven a ser los amos y señores y sus bolsillos comienzan otra vez a llenarse de dinero. Imagino que ese es para ellos un hermoso sueño del que jamás quisieran despertar.
Pero como los opositores son tan variados como imaginativos, hay también entre ellos un tipo bastante raro que asegura tener encuentros cercanos con seres extraterrestres. La fantasía de este consiste en que sus amigos, los alienígenas, lleven su petición y que esta sea escuchada por alguna federación intergaláctica. En ella solicita que seamos invadidos con naves de avanzada tecnología provenientes del espacio exterior. Al mismo tiempo pide que después de que el país sea sometido, él, que una vez quiso ser diputado sin conseguirlo, sea nombrado emperador, no solo de aquí, sino de todo el universo. Ustedes dirán si un sueño así podría ser posible.
Pero sumemos también a eso a una opositora que se cree descendiente del rey David, aquel que cuando joven derrotó al gigante filisteo. Los delirios de esta consisten en que espera un día irse con los líderes de la izquierda y de la derecha a vivir a la Jerusalén prometida. Sí, a esa hermosa ciudad celestial que tiene calles de oro. Lo cierto es que, si no fuese ese lugar solo una alegoría y gente como esta pudiese irse a vivir allí, tanto el oro de sus calles como todo a lo que ellos pudieran poner mano estaría en riesgo de desaparecer. Es a ese nivel de corrupción y poca confiabilidad que estos han llegado.
Los partidos ARENA y FMLN, animados por la antes mencionada que dice ser de estirpe hebrea, ruegan para que, aunque sea solo por una vez, el Todopoderoso deje de estar del lado de los buenos y se ponga del lado de los malos, que abra con su gran poder las puertas del Cecot como un día abrió las aguas del mar Rojo y salgan libres esos miles que podrían, tal vez no darles el triunfo en las próximas elecciones, pero sí salvarlos de la extinción. Me parece que son anhelos de sobrevivencia imposibles, porque Dios jamás dejará de estar del lado de los justos.
Siguiendo con el recuento de utópicos y soñadores personajes, hay también por ahí una diputada cuya excelsa ilusión es convertir al país en una especie de «Ciudad Peluche», donde ciertas cosas suceden de manera opuesta a la realidad. Por lo visto, tiene muy claro que solo en un mundo así podría volver a ganar alguien como ella, que se ha opuesto completamente a todo.
Ya para terminar, quiero mencionar a un siquiatra cuyo apellido rima con araña. Este desde hace tiempo viene soñando con hacer de El Salvador un gigantesco manicomio donde él, que a diferencia de sus pacientes sí está bastante loco, procurará erigirse como rey indiscutible. Este tiene también la insana ilusión de que el país deje de ser un lugar seguro y vuelva a ser aquel en el que los pandilleros le proveían cadáveres a granel para que ejerciera otra de sus ocupaciones.
Más de alguno podría pensar que invento o exagero en este artículo… Bueno… tal vez un poco, pero en términos generales así es como piensa y actúa la oposición en este país, principalmente ahora que la dura realidad le pegó en la cara.
