Ante los récords de temperatura en el mundo es imprescindible anticipar los límites de calor y de humedad que puede soportar el cuerpo humano.
El término científico internacional para medir esa capacidad de resistencia es la «temperatura de globo y bulbo húmedo» (TGBH [wet bulb globe temperature, WBGT, en inglés]), que combina el cálculo del calor con el grado de humedad.
El «bulbo» es el depósito de mercurio de un termómetro tradicional, envuelto en un paño húmedo, cuya evaporación sirve para medir la temperatura húmeda del aire.
Al llegar a ese punto crítico de calor, el sudor, la principal herramienta del cuerpo para reducir su temperatura central, no logra evaporarse de la piel, lo que eventualmente conduce a un golpe de calor, un colapso de los órganos internos y la muerte.
Solo se ha alcanzado una TGBH de 35 °C una docena de veces, principalmente en el sur de Asia y el golfo Pérsico, declaró a la AFP Colin Raymond, del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA.
Ninguno de esos casos duró más de dos horas, lo que significa que nunca ha habido «fenómenos de mortalidad masiva» vinculados a este límite de supervivencia humana, dijo Raymond, autor de un amplio estudio sobre el tema. Pero el calor extremo no necesita acercarse a ese nivel para matar a una persona.
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De hecho, todo el mundo tiene un umbral diferente según la edad, la salud y otros factores sociales y económicos, dicen los expertos.
Por ejemplo, se estima que más de 61,000 personas murieron debido al calor del verano pasado (boreal) en Europa, donde rara vez hay suficiente humedad para crear temperaturas de bulbo húmedo peligrosas.
Pero a medida que las temperaturas continúan aumentando (julio fue el mes más cálido registrado hasta ahora), los científicos advierten que los episodios de TGBH también serán más habituales.
La frecuencia de estos eventos se ha duplicado, como mínimo, en los últimos 40 años, explicó Raymond, que consideró el aumento como una consecuencia grave del cambio climático causado por el hombre.
Raymond calculó que las temperaturas de bulbo húmedo «superarán regularmente» los 35 °C en varios puntos del mundo en las próximas décadas, si el mundo se calienta 2.5 °C por encima de los niveles preindustriales.
Para probar este límite, los investigadores de la universidad pública de Pensilvania midieron las temperaturas centrales de personas jóvenes y sanas dentro de una cámara térmica.
Los participantes alcanzaron su «límite ambiental crítico» cuando el cuerpo no podía evitar que la temperatura central siguiera aumentando a una TGBH de 30.6 °C.
Joy Monteiro, un investigador en India que el mes pasado publicó un estudio en «Nature» que analiza las temperaturas de bulbo húmedo en el sur de Asia, dijo que la mayoría de las olas de calor mortales en la región estaban muy por debajo del umbral teórico 35 °C.
«La resistencia humana a esas temperaturas es tremendamente diferente en función de cada persona», dijo a la AFP.