Comer saludablemente es esencial para tener una vida sana, esto sin importar si se es niño o adulto. Cuando se llega a la tercera edad llevar un régimen de salud adecuado no es una recomendación, sino una obligación.
Con el paso de los años, el cuerpo envejecer por fuera y por dentro. Muchas personas no le dan la importancia necesaria a esto y no llevan un régimen alimenticio adecuado.
Muchas veces, cuando se escucha la palabra dieta se cree que consiste en evitar o dejar de comer ciertos alimentos, pero no es así, sobre todo en los adultos mayores para quienes realizar una dieta significa ingerir comidas con nutrientes que son esenciales para su organismo.
Para el licenciado en nutrición y dietista, William Lizama, de la clínica Nutrivela, la falta de atención en los alimentos que se consumen no solo se da en las personas de la tercera edad, sino que también hay quienes no llegan a los 60 años y su organismo, internamente, pareciese de una persona mayor debido a la calidad de vida que llevan.
«Se puede clasificar a un adulto mayor por dos formas. Primero, por sus propias condiciones, por sus deberes, derechos y sus responsabilidades. Por qué es importante definir a este primero, porque según todos estos aspectos así debe ser su alimentación o su dieta en general. El segundo va relacionado a la fisiología del cuerpo, hablamos ya del envejecimiento».
Entre los factores que hacen que las personas de la tercera edad no ingieran los alimentos necesarios y adecuados es el hecho que pasen solos, es decir, nadie controla su alimentación. Además, que se vuelven más sedentarios, realizan un menor gasto energético y en algunas ocasiones hay hasta pérdida de apetito.
En cuanto a los alimentos que se deben evitar, el dietista asegura que debe suprimirse las carnes rojas (res, cerdo u otro animal). Si bien son una fuente de proteínas, detalla que son mejores los alimentos alternativos.
«A mí no me gusta mucho decir qué se debe evitar. Es mejor decir qué se va a comer, pero si hablamos de evitar, más que todo por la muerte celular, no se debe ingerir alimentos ultra procesados porque son altos en sodio y grasas saturadas, productos con colorantes que podrían causar problemas de absorción y, según estudios, se relacionan al cáncer del colon, entre otros», detalla.
Entre las opciones de proteínas que el especialista recomienda se encuentran los quesos frescos, las lentejas y las diferentes semillas, de manera que con un consumo mínimo se obtenga la energía que el adulto necesita
«Un alimento que no puede faltar en este caso, sino tiene alergia, es el huevo. Este es muy económico y no podemos separar ambas cosas: lo económico y social, porque en lo social va la condición de la persona, si vive solo o con familia, si tiene quien le cocine o no. El huevo es una proteína que no necesita mucha preparación y se puede combinar con las verduras. Es una buena fuente de proteína, rica en nutrientes y grasa saludable», agrega.
Lizama afirma que la nutrición y la buena alimentación se debe de cuidar desde la niñez, conforme se llega a la juventud y a la adultez, ya que entre más balanceado se come se tendrá una tercera edad más saludable y con menos posibilidades de enfermar.
RECOMENDACIONES PARA UNA BUENA ALIMENTACIÓN
El experto recomienda estar pendiente de ciertos factores que ayudarán a que el adulto mayor lleve una mejor alimentación, consuma los nutrientes que de acuerdo a su edad necesita y, sobre todo, de manera económica o apegada a su bolsillo.
Ver sus sentidos. Como todas las células se desgastan a medida se envejece, el gusto y el olfato suelen perderse o disminuir, por eso el adulto busca la manera de sentir el sabor de antes, cuando se era joven, y es allí cuando se comienza a colocar más sal o azúcar a los alimentos ya preparados. Sin embargo, es necesario que conforme se vaya aumentando la edad, se vaya disminuyendo el sodio.
La masticación. También es importante porque va a decir si el adulto puede consumir alimentos sólidos o no. Este es un factor que muchas veces no se toma en cuenta al momento de dictar una alimentación, ya que al no conocer su estado dental, se le dejan ciertos alimentos que son difíciles de ingerir y para evitar molestias la persona decide no comerlos.
Las legumbres. Son un tipo de alimento que no debe faltar en la alimentación del adulto ya que es fuente de nutriente, posee alto contenido de proteínas, son bajas en grasa y ricas en fibra soluble. Una opción económica son los frijoles.
Los integrales. No pueden faltar en la alimentación. Deben estar presente, por lo menos, en uno de los periodos de comida. Algunas opciones son el arroz integral, el pan y la avena.
Alimentos verdes. Se sabe que las frutas y verduras son imprescindibles comerlas a cualquier edad, pero en los adultos mayores se debe preferir las que sean color verde fuerte, entre ellas: el apio, la espinaca, la mora, el chipilín. Se debe evitar verdes muy pálidos como la lechuga.
La grasa. Es muy importante siempre y cuando sea grasa de origen vegetal. Si la economía lo permite, se recomienda utilizar aceite de oliva extra virgen con alimentos que se consuman de manera cruda, y aceite de oliva para cocinarlos. Otra buena opción es consumir semillas.