Informar a las niñas, adolescentes, jóvenes y familias sobre la salud e higiene de la menstruación es el principal objetivo del proyecto Mariposas Rojas de Plan International El Salvador. Este novedoso proyecto se basa en un modelo educativo implementado desde hace tres años y surgió a partir de la necesidad de las niñas por conocer el tema.
El objetivo es brindar conocimientos a niñas y adolescentes sobre la naturaleza de la menstruación. «Queremos que ellas vivan ese proceso con conocimiento, pero también sin “bullying”, sin acoso, sin miedo, sin vergüenza y deconstruyendo mitos y tabúes», explicó Yamila Ábrego, asesora de salud de Plan International.
El modelo educativo está dirigido a las niñas y también a adolescentes y hombres jóvenes de 10 a 14 años para que sean aliados en este proceso y eviten la discriminación. También las familias reciben formación para que brinden condiciones favorables, como una infraestructura sanitaria.
El proceso formativo dura algunos meses y en cada sesión los facilitadores de Plan se apoyan en materiales educativos, entre estos, un libro con los temas, guías para los orientadores y libretas informativas para las niñas. También cuentan con juegos de tarjetas y dados para aprender de forma lúdica sobre el proceso.
Se implementa en comunidades con el apoyo de líderes comunitarios y las municipalidades. Además, se han involucrado algunas instituciones del Estado a escala comunitaria, como el Ministerio de Salud (Minsal). De acuerdo con Ábrego, la respuesta ha sido satisfactoria. «Cuando ese momento llegó, no tuve miedo porque había aprendido sobre la menstruación. Lo que aprendí en los procesos de facilitación me ayudó a hablar más con mi mamá y contarle con más confianza al respecto», informó Adriana, una adolescente participante.
Actualmente, unas 370,000 personas de comunidades han sido beneficiadas. «Ahora siento que tengo que apoyar a otras chicas. Las adolescentes debemos permanecer unidas, porque la menstruación nos sucede a todas. No debo burlarme ni discriminar», aseguró Karen, una participante.
El modelo ha sido compartido con otras instituciones y oficinas de Plan en otros países. Asimismo, lo han retomado otras instituciones del comité de prevención de la violencia en Cabañas.