Hace quince años nació en El Salvador el grupo musical «Proyecto Acústico» a partir de la unión de varios amigos con gustos afines al jazz. Actualmente está conformado por seis integrantes: Juan Carlos Romero, en el bajo; Mauricio Hernández, en la batería; Roberto José Vargas, en el saxofón; Ernesto Buitrago, en las congas; Ernesto Figueroa, en la guitarra y Carlos Romero, en el vibráfono.
«Todos somos músicos profesionales, a excepción de uno que es arquitecto. Encontramos en el jazz un género donde podemos desaguar lo que nosotros tenemos dentro, podemos expresar algunas cosas, musicalmente hablando, que no podemos expresar con otros estilos, es como una necesidad de hacerlo», explica Carlos Romero, quien también es director.
En sus inicios, el grupo empezó a formarse con instrumentos acústicos, de allí la segunda palabra de su nombre. Conforme el tiempo pasó fueron incorporando otros instrumentos eléctricos, que destacan los arreglos de sus producciones musicales.
«La palabra proyecto surgió porque es algo que no está ceñido a que nosotros no podamos hacer música con canciones o con poemas, es decir, es como un proyecto creativo, un instrumento con el cual podemos hacer otras cosas y expresar lo que nosotros hacemos, por eso le pusimos “Proyecto”. Es algo más abierto, se puede hacer música cantada o poemas musicalizados, pero siempre con el gusto que requiere el jazz», detalla Romero.
«Hay percusiones que no tienen afinación, es decir, que no producen notas, y hay percusión que sí producen notas, dentro de ellos está el vibráfono, la marimba y el xilófono».
Carlos Romero, director.
«Proyecto Acústico» comenzó interpretando covers. Pero tras 15 años de trayectoria, ya poseen dos discos con música propia compuesta en su mayoría por los integrantes, aunque existen algunas que han sido concedidas por amigos.
«Tenemos dos discos que están en las plataformas. El primero se llama «Toma 1» y el segundo se llama «Ruta panamericana», el nombre del primero es por ser el primer disco. El otro, es porque así se llama una de las canciones, además esa calle está en diferentes puntos de América. La carretera viene desde Alaska y creo que termina en Buenos Aires. Es como el concepto de unión de toda América», señala.
El vibráfono, único en el país

Las diferentes canciones creadas por la agrupación también poseen un sonido suave que emana del vibráfono, un instrumento que en El Salvador, únicamente es utilizado por Carlos Romero. «No tengo competencia, solo yo lo toco», afirma.
Este instrumento, que pertenece a la familia de la percusión, es muy parecido de manera física al piano, aunque al momento de tocarlo, visualmente da la impresión que es una marimba.
«El vibráfono es parecido al piano, el teclado es similar. La diferencia con la marimba y el xilófono es que en el vibráfono las teclas son de metal y se tocan con unas baquetas, no con un mazo. Yo toco marimba también, por eso me decanté por este instrumento, porque era relativamente fácil para mí», señala Carlos.
El director agrega que los instrumentos de percusión son los que se golpean con la mano, un mazo o una baqueta. «Hay percusiones que no tienen afinación, es decir, que no producen notas, y hay percusión que si producen notas, dentro de ellos está el vibráfono, la marimba y el xilófono», afirma.
Festival de Jazz

Panamá Jazz Productions junto a la Fundación Danilo Pérez presentaron «La Ruta del Jazz» para celebrar los 20 años del Panamá Festival Jazz, un festival que se desarrolla en el país centroamericano para reunir a los amantes de este estilo musical. Este año se realizará desde este lunes 16 hasta el próximo 21 de enero.
«Tras dos décadas de dedicación y trabajo continuo el Panamá Jazz Festival se ha convertido en una atracción de turismo cultural con la visita de más de medio millón de personas de diferentes latitudes a lo largo de los años. El festival ha anunciado más de $5 millones en becas y desarrollado diversos programas educativos integrales que han creado oportunidades para construir un futuro mejor para las personas y sus comunidades», expone la organización en su página web.
Según la agenda, diferentes artistas como como Chucho Valdés, de Cuba; Catherine Russell, Children Of The Light (trío portador del legado de Wayne Shorter), Erika Ender, panameña y compositora, estarán de invitados. Además, y por primera vez, se tendrá la participación de un grupo salvadoreño en el festival.
«Este es un festival internacional, es un festival fuerte y creo que del área centroamericana solo estamos nosotros y obviamente los panameños. Llegamos a través de la embajada de El Salvador en Panamá y de la embajadora Diana Vanegas, ellos fueron los que nos contactaron porque quieren mostrar que en El Salvador hay cosas buenas, que tenemos una propuesta que dar», explica, Carlos.


«Proyecto Acústico» tendrá su presentación el próximo jueves 19 de enero, desde las 4 hasta las 6 de la tarde, alternando con el «New York Jazz Academy», en el Ateneo de Ciudad del Saber. El miércoles 18 de enero impartirán una Master Class, con el tema de Identidad y Jazz en El Salvador, de 1 a 3 de la tarde, en la Ciudad del Saber, en el Auditórium del Edificio 184.
El Panamá Jazz Festival fue establecido en septiembre de 2003. Su precursor es Danilo Pérez, músico panameño ganador de un Grammy en 2021.