María Elena Canales, de 81 años, es considerada la primera mujer que comenzó a hacer y vender pupusas en San Francisco Gotera, Morazán. Desde entonces, diferentes generaciones han degustado el plato típico elaborado por las manos de esta pupusera.
La historia de María Elena se remonta 43 años atrás cuando, sin saber hacer pupusas, decidió asumir el reto, debido a la necesidad de recursos económicos que había en su hogar. Emprendió con una venta de pupusas en el mercado del barrio El Calvario.
«Yo no sabía nada de [elaborar] pupusas, pero cuando era joven me puse yo solita, porque a mí nadie me enseñó. Yo solo le dije a mi esposo [Francisco Quintanilla] que me hiciera dos hornillas, una para el chocolate y el café y la otra para poner el comal en el que comencé a hacer las pupusas. Pero primero me fui a la iglesia a orar para que todo me saliera bien», contó la mujer.
Con el paso del tiempo, fue mejorando la técnica para hacer las pupusas, y los clientes aumentaron. Ya no solo la buscaban personas de San Francisco Gotera, sino también de otros municipios de la zona norte del departamento. Quienes llegaban hacer sus compras o diligencias en dicha ciudad aprovechaban para desayunar o almorzar pupusas.
Entre las anécdotas que guarda esta mujer se encuentra el día que escuchó unos disparos cerca de su venta de pupusas, cuando inició la guerra en El Salvador. Nunca se imaginó que ese conflicto duraría 12 años, dijo.
Añadió que ese día fue triste para ella, pues tuvo que correr junto con su esposo para refugiarse y dejó abandonada toda su venta.