El Salvador cada día apuesta por impulsar al sector agropecuario del país por medio de diferentes proyectos y estrategias. Una de ellas es el proyecto Fortalecimiento del emprendimiento agropecuario en diferentes municipios de El Salvador, el cual ha beneficiado a un total de 220 iniciativas rurales.
En general, la estrategia ha impulsado el sector rural en términos de calidad de vida, seguridad alimentaria, ingresos y capacidades técnicas, y a su vez, permitirá el empoderamiento y fortalecimiento de las familias productoras con actividades productivas, aseguró el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG).
Durante el cierre del proyecto, el titular del MAG, Enrique Parada, informó que para la ejecución del proyecto se han destinado $600,000, financiados por la Unión Europea, los cuales servirán para impulsar los 200 emprendimientos de 11 municipios del país, abonando así al desarrollo local.
«En este contexto de crisis mundial, la agricultura debe ser estratégica para todos los gobiernos. Debemos garantizar que haya producción local para alcanzar la seguridad alimentaria; y que las personas obtengan sus alimentos a un precio justo», explicó Parada.
Gracias al proyecto, un total de 80 emprendimientos de pollo de engorde lograron comercializar 50,000 libras de carne por un valor de $75,000; y además 60 emprendimientos de hortalizas vendieron $8,000.
Asimismo, 40 negocios de gallina han logrado mejorar su producción y 22 negocios de cerdos también han incrementado sus crías; mientras que 18 pequeñas empresas apícolas comercializaron $2,000.
De acuerdo a datos del MAG, el proyecto se implementó y se ejecutó con familias de Santa Catarina Masahuat, en Sonsonate; Jujutla, en Ahuachapán; San Francisco Morazán, Chalatenango; yo en Mercedes La Ceiba y San Francisco Chinameca, en La Paz, entre otros.
El MAG agregó que como parte de los logros 600 familias productoras se han convertido en agentes de su propio desarrollo, además se han beneficiado indirectamente a 1,100 personas que invirtieron tiempo y esfuerzo en la producción de hortalizas, crianza de cerdos, módulos de gallina criollas mejoradas, pollo de engorde y apicultura.
Alfredo Alarcón, coordinador del proyecto, reveló que en la selección de los beneficiarios se tomó en cuenta las familias que viven en el Corredor Seco, que tuvieran potencial de desarrollo productivo agropecuario.
Agregó que el proyecto contó con la participación de 340 mujeres y 320 hombres, incluyendo jóvenes.
El trabajo de diversificación de parcelas fue realizado en conjunto con el Centro Nacional de Tecnología Agropecuaria y Forestal (Centa), lo que permitió mayor cobertura a escala nacional.
Por su parte, el director del Centa, Edgardo Reyes, comentó que la apuesta de la iniciativa es empoderar a los productores para impulsarlos en sus proyectos de emprendimiento y así incrementar la economía local.