Esta frase resume lo que acabamos de vivir, la oposición política no tuvo la más mínima capacidad para interpretar las aspiraciones del pueblo honrado y mayoritario; ahí están los resultados, quedó pulverizada, unida a la mala reputación que tiene ante el salvadoreño honrado. Asimismo, los analistas pensantes y preparados no participaron, ante los hechos contundentes del buen Gobierno actual, los grandes logros y la alta capacidad de ejecución, en contraposición a las torpezas continuas y la falta de propuestas.
El pueblo habló, ¿cómo rebatir el Plan Control Territorial y el régimen de excepción y sus indiscutibles resultados hasta convertirnos en el país más seguro de Latinoamérica? No se pueden negar los siguientes hechos: ranqueamos en el primer lugar de crecimiento en turismo en América, las mejoras en salud y educación, el mayor empleo formal, más y mejor infraestructura productiva, el avance en inversiones tecnológicas, así como las alianzas con empresas de vanguardia, mayor cobertura en electricidad, agua e internet de alta velocidad, acciones concretas en beneficio a la primera infancia, entre algunos de los logros obtenidos en los primeros cinco años.
El mote de gorgojos está bien puesto, son insignificantes, se lo ganaron a pulso; no hicieron campaña, hicieron el ridículo, sirvieron de chiste por meses. Esperamos el accionar de la Fiscalía para los que incitaron a un golpe de Estado (sin el mínimo apoyo) e hicieron apología del delito.
El pueblo mayoritario tomó las mejores decisiones, votó por la continuidad del proceso a través de la bandera de NI, bajo un firme liderazgo que tiene reconocimiento a escala mundial. Es un orgullo que el presidente Nayib Bukele se presente en Doha, Naciones Unidas, CPAC, con mensajes contundentes y gran impacto mundial. Cuando visita países, cuando habla con líderes mundiales, es un ejemplo de excelencia, todos quieren imitar el modelo, lo que no entienden es que este es un proceso inédito que tiene varias facetas y se logra a través de ganar la confianza de la población; esto garantiza gobernabilidad a través de la Asamblea Legislativa.
Los próximos cinco años son para consolidar los crecimientos aprovechando la base en seguridad, se debe continuar con el plan de fomento a la inversión extranjera, la construcción de viviendas para todos, la diversificación de la matriz energética, la construcción de infraestructura productiva, los planes de electrificación total, así como los de agua e internet.
Los incrementos graduales al ingreso para crear un mercado interno fuerte son imperativos, la creación de más fuentes de trabajo nos permite incorporar a la mayoría al proceso de crecimiento. El buen desarrollo al incremento del turismo abona a lo anterior, nos estamos convirtiendo en un «hub» tecnológico en el área. La reforma política constitucional nos ayudará a consolidar el proceso a través del tiempo. Los nuevos socios diplomáticos-comerciales nos ayudan a desarrollar todo el plan; la nueva reestructuración territorial nos hace más eficientes. Se percibe en el ambiente un aroma de triunfo, de esperanza, de confianza. Nuestro querido país, El Salvador, por primera vez en la historia es un ejemplo positivo. Ya le dimos vuelta a la página.
La oposición política lo primero que tiene que hacer es un autoexamen realista y aceptar su total debacle, ahora la mayoría seguiremos edificando el país que soñamos. Sería bueno que aparezca una oposición pensante que haga propuestas positivas, que genere discusiones de altura. ¿Cómo se atrevió a competir con esos candidatos de tercera que solo hicieron el ridículo ante un líder que puntea el ranking mundial? Ellos mismos se descalificaban, ignorantes y sin propuestas, cumas, capiruchos y liberación de terroristas, contra todo un proceso de desarrollo en paz, libertad y seguridad.
A esta mínima oposición, que antes se lucró de los bienes del pueblo y que pactó con los terroristas, la mayoría honrada la repudió, todo lo que intentó no le funcionó ¡¡¡Es que además de corruptos e ignorantes son pasmados!!!