Henry Daniel Esquivel, enfrentó este jueves la vista pública por el delito de estafa agravada en perjuicio de seis víctimas quienes en sus declaraciones llegaron a señalarlo directamente ante uno de los jueces del Tribunal Primero de Sentencia de San Salvador que está conociendo de la causa.
El imputado fue acusado por nueve personas a quienes engañó con importarles vehículos y crear una sociedad de ese rubro prometiéndoles que por cada $1,000 invertidos iban a ganar $100.
En el juicio que finalizó ayer, se conoció que con tres de los estafados concilió, pero a otras seis víctimas no les devolvió el dinero que invirtieron y cuyos montos van desde los $5,000 hasta los $18,000.
Todos los afectados que han declarado en la vista pública incriminaron a Esquivel y le manifestaron al juez el grave daño patrimonial que les causó a raíz de la estafa.
Una de las víctimas quien dijo que entregó al imputado $16,000, manifestó que, en enero del año 2021, en la aduana de Nejapa el imputado le prometió traerle un vehículo año 2015, en un primer momento le canceló $5,200 de adelanto y luego le pidió otros $2,800.
La víctima en su testimonio expresó que Esquivel siempre tenía una excusa para no entregarle el vehículo, le manifestaba que los trámite estaban lentos y que no salían.
Al final le informó que ya no le iba a traer el vehículo y que con el dinero ya entregado mejor se incorporara a una sociedad de importación de vehículos donde había más personas, pero que para igualar a los demás socios le entregara otros $8,000.
La afectada contó al juez que el imputado le hizo firmar un mutuo (contrato) donde se comprometía a pagarle la ganancia por la inversión, pero al final solo fue un mecanismo para convencerla a que invirtiera.
Un tramitador aduanal quien también fue estafado con $12,900, en su declaración, dijo que pagó por cuatro vehículos que nunca recibió, pese a la promesa que en 30 días se los iba a entregar.
Mientras que un joven a quien le prometió importarle un vehículo Nissan año 2014, declaró que le pagó $5,000. «Él se hacía pasar como importador en Mejicanos, me indicó que yo podía darle el dinero y él me entregaba un mutuo acuerdo y que podíamos ser socios porque estaba creando una sociedad entre todas las víctimas que estamos aquí, todo consistía en aportar dinero para que él se hiciera importador de vehículos y por cada $1,000, nosotros íbamos a ganar $100», expresó el joven en la vista pública.