La Fiscalía de Perú citó a la presidenta Dina Boluarte a exhibir relojes Rolex en su posesión el 5 de abril, pero la mandataria pidió hacer su declaración ante la autoridad a la brevedad, en medio de la investigación por presunto enriquecimiento ilícito, ante la adquisición de los relojes de marca no declarados.
«Se ha citado formalmente a la presidenta de la República, para que exhiba los relojes Rolex y preste la declaración el viernes 5 de abril», dijo el Ministerio Público en un comunicado difundido el domingo en la prensa.
Las autoridades indicaron que en los allanamientos del viernes y sábado en la vivienda particular y en Palacio de Gobierno, no se encontraron los objetos de valor y tampoco la mandataria quiso entregarlos. Los allanamientos fueron autorizados por el Juzgado Supremo de Investigación Preparatoria, que preside el juez supremo Juan Carlos Checkley, a petición del fiscal de la nación, Juan Carlos Villena.
Pese a que no encontraron los relojes, la Fiscalía señaló que «obtuvo otros elementos de interés para la investigación». De acuerdo con medios locales, se hallaron documentos de cuándo habría sido obtenido uno de los relojes.
La Fiscalía realiza la investigación sobre un presunto enriquecimiento ilícito, debido a que Boluarte no habría declarado su posesión dentro de sus bienes. Las indagaciones comenzaron el pasado 18 de marzo.
Respuesta de Boluarte
Tras el comunicado de la Fiscalía, la presidenta envió una nota para pedir que se le tome declaración indagatoria «de forma inmediata, a fin de esclarecer lo más pronto posible los hechos en materia de investigación».
Argumentó, en la misma nota difundida por la oficina del abogado Mateo Castañeda, que lo hace ante «la turbulencia política que se viene produciendo».
No confirmó si llevará o presentará los relojes Rolex.
En caso de que la Fiscalía la acuse de enriquecimiento ilícito, Boluarte solo respondería en un eventual juicio después de julio de 2026, cuando termina su mandato, según establece la Constitución. El escándalo, sin embargo, puede derivar en un pedido de destitución de Boluarte desde el Congreso alegando «incapacidad moral».
Mientras avanzan las pesquisas, este lunes el ministro peruano del Interior, Víctor Torres, anunció su renuncia. «La señora no tiene nada que esconder. Me voy en paz», aseguró.