Guatemala sobrepasó el 8 de septiembre el medio millón de contagios de la COVID-19, mientras los líderes políticos todavía analizan una nueva ley de emergencia para atender la pandemia.
El país subió a 505, 640 infecciones el 9 de septiembre. Según el Ministerio de Salud, hay 47, 093 casos activos.
En la actualización publicaron que 12,606 fallecieron debido a esta enfermedad y que la tasa de mortalidad por cada 100,000 habitantes se encuentra en 71.6. La tasa de letalidad es de 2.4 %.
Ayer, por tercer día consecutivo fueron convocados los 19 bloques parlamentarios por el presidente del Congreso, Allan Rodríguez, junto a representantes de Salud, con el objetivo de establecer «disposiciones legales para la adquisición de medicamentos y equipo hospitalario, así como la contratación de médicos y personal técnico».
Los parlamentarios improbaron por segunda ocasión el estado de calamidad al que el Gobierno acudió para frenar el aumento de contagios, pero a criterio de los congresistas la presidencia de Alejandro Giammattei no ha desarrollado un buen manejo de la pandemia, pese a que ha tenido el financiamiento.
La red pública y los hospitales temporales están colapsados, no solo por pacientes de la COVID-19, sino por otras emergencias.