Los milicianos del movimiento islamista palestino Hamás que el sábado atacaron el sur de Israel mataron a «más de 100 personas» en el kibutz Be’eri, una pequeña comunidad agrícola, informó el portavoz del Servicio de Identificación de Víctimas de Desastres (ZAKA), Motu Bukjin, quien participó en la identificación de las víctimas.
«Había muchos, más de 100» muertos, contó el portavoz de la organización no gubernamental. Los milicianos «dispararon contra todos, asesinaron a sangre fría a niños, bebés, ancianos, a todos», agregó.
Ayer se cumplieron tres días de trabajo de los voluntarios de ZAKA, quienes han recuperado los cadáveres de las zonas de combate entre Hamás e Israel. «El corazón se rompe, las vistas son duras. Estamos en días muy difíciles. No hay palabras que puedan describir la magnitud del desastre y los horrores que hemos encontrado. Junto con muchas unidades militares y un equipo de emergencia de la Policía israelí, docenas de voluntarios trabajaron decidida y valientemente, a veces bajo fuego, en el kibutz Be’eri y en otras regiones de la zona fronteriza. Este evento es duro, y en estos momentos difíciles, nuestros corazones están con las familias afligidas», compartió el líder de ZAKA, Avi Drei.
DESPLAZAMIENTOS
La guerra entre el movimiento islamista palestino Hamás e Israel ha obligado desde el sábado a desplazarse a más de 187,500 personas dentro de la Franja de Gaza, indicó la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la Organización de las Naciones Unidas (OCHA).
«El número de personas desplazadas aumentó considerablemente en la Franja de Gaza, elevándose a más de 187,500 desde el sábado. La mayoría están refugiados en las escuelas de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos», declaró a la prensa este martes el portavoz de la OCHA, Jens Laerke.
Mientras cientos de personas buscaban refugio, Israel anunció también que había retomado zonas en torno de la Franja de Gaza y siguió bombardeando el enclave, contra la cual declaró un asedio total en una guerra que ya ha dejado saldo de miles de muertos. «Estamos ya en medio de la campaña, pero esto solo es el principio.
Ganaremos con la fuerza, con mucha fuerza», advirtió el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu. Las fuerzas de seguridad «han retomado más o menos el control de la frontera» con Gaza, pero «las infiltraciones pueden seguir», declaró el portavoz militar Richard Hecht.