En Atiquizaya, Ahuachapán, realizaron el primer Festival de La Cochinita, una gastronomía que se elabora del cerdo, especialmente de la cabeza de este animal. La festividad se desarrolló ayer en el parque central.
Comer Cochinita en el desayuno los domingos es una tradición en este pueblo del occidente del país. En la actualidad, la fabrican siete familias originarias de la localidad y tiene una historia de más de 300 años.
Vilma Concepción Albánes, de 79 años, fue una de las mujeres que recibió un reconocimiento de parte de Afrodescendientes Organizados Salvadoreños (AFROOS), que organizó el evento. Vilma afirmó que tiene más de 50 años elaborándola.
Niña Conchita, como es conocida en la localidad, la comercializa todos los domingos desde la 5:30 de la mañana, a un costado del Parque San Juan, y es de las más longevas que aún se encuentran vigentes elaborando este aperitivo.
Luisa María, su sobrina, comenzó a emprender preparando este platillo desde hace 10 años, en el barrio las Salinas. Ayer preparó tres cabezas, equivalente a 300 porciones, con el valor económico de $1. Relató que aprendió la receta de su madre, Teresa Albanés.
«Esto es una tradición que se mantiene viva de generación en generación, todas las mañanas de domingo, en Atiquizaya se visualizan grandes colas, porque acá toda la gente sale por su porción de Cochinita. Invitó a todo aquel que quiera probar algo rico, que venga los domingos, desde muy temprano», expresó María Luisa.
La alcaldía, por acuerdo municipal, declaró que: todo el tercer domingo de agosto, se celebrará el día de La Cochinita, para reconocer la labor de quienes mantienen viva la tradición