El Salvador se ha convertido en un referente para la geotermia en todo el mundo. La Comisión Ejecutiva Hidroeléctrica del Río Lempa (CEL) organiza la Reunión Anual de Alto Nivel de la Alianza Geotérmica Global en conjunto con la Agencia Internacional de Energías Renovables (Irena), lo que se convierte en un escaparate de primer nivel de las políticas energéticas del Gobierno del presidente Nayib Bukele.
El país fue seleccionado para organizar el encuentro debido a los éxitos para generar energía limpia mediante varios proyectos de geotermia. En enero, en la última reunión de Irena, los logros salvadoreños llamaron la atención del resto del mundo no solo por los proyectos en funcionamiento, sino por su potencial que podría cuadruplicar la generación actual.
Gracias a la proyección que lanzó el presidente Bukele de «volcano power», el mundo fijó su atención en El Salvador y la energía que surge de las entrañas de la tierra, que constituye una de las principales fuentes para generar electricidad en la matriz energética nacional. De hecho, el 25 % de la producción eléctrica que se consume a diario en el país es geotérmica, pero en conjunto con otras fuentes renovables llega al 85 %. Esto es un logro destacado en el contexto mundial no solo por los altos precios de los combustibles fósiles, sino también por los esfuerzos globales para frenar la emisión de gases de efecto invernadero que dañan el medioambiente.
Otros países productores de energía geotérmica han enviado 45 delegaciones para participar en la Reunión Anual de Alto Nivel y conocer las estrategias que impulsa El Salvador: energía geotérmica para el desarrollo sostenible y como parte de la transición energética, el calor geotérmico como herramienta de mitigación hacia la adaptación y el financiamiento de la geotermia con diferentes iniciativas.
El director general de Irena, Francesco La Camera, aseguró que «El Salvador tiene la función natural de líder en la región en generación geotérmica», por su porcentaje de producción. A escala mundial, la energía geotérmica es menos del 1 % del suministro primario, por lo que tiene un gran potencial de crecimiento y refleja el liderazgo salvadoreño.
Para La Camera, el país puede ser el centro desde donde se desarrolle para la región un sistema de energía más limpio y que genere más empleos en la población.